PAÍS
La ceremonia contó con la participación del Presidente Sebastián Piñera, quien acudió a la instancia luego de encabezar minutos antes en La Moneda la fotografía oficial de este 18 de septiembre. Entre los ministros que llegaron de manera presencial al Te Deum Ecuménico, estuvo Víctor Pérez, de Interior; Mario Desbordes, de Defensa y Andrés Allamand, de Relaciones Exteriores, además de autoridades de los otros poderes del Estado, como la titular del Senado, Adriana Muñoz.
La pandemia y las referencias al plebiscito por una nueva Carta Magna marcaron este viernes el Te Deum Ecuménico en conmemoración del 210 aniversario de la primera Junta de Gobierno del país.
La liturgia, a la que acudieron el presidente Sebastián Piñera y la primera dama, Cecilia Morel, reunió a tan solo 50 personas entre autoridades políticas y eclesiásticas, alejándose de las multitudinarias celebraciones de otros años debido al coronavirus.
Durante la ceremonia, el arzobispo de Santiago, Celestino Aós, animó a los chilenos a participar en el histórico plebiscito que tendrá lugar el próximo 25 de octubre, que abre la posibilidad de dejar atrás la actual Carta Magna, redactada en dictadura y considerada por muchos como la causa de las desigualdades del país.
«Participe, haga su aporte expresando su voluntad a través del voto. Para decidir bien, infórmese, que le digan las consecuencias de cada opción, pero no permita que nadie le obligue a cómo votar o que nadie decida por usted», afirmó Aós.
El clérigo se refirió a la crisis social que vive Chile desde el pasado octubre, la peor desde el retorno a la democracia en 1990, e hizo un llamado a la unidad: «Somos un pueblo en marcha. Solo unidos superaremos las injusticias y nos levantaremos de esta crisis».
La presidenta del Senado, Adriana Muñoz también aprovechó la instancia para animar a los ciudadanos a «participar activamente en las decisiones del país con el voto, de forma informada y sobretodo a través del diálogo».
En el acto, que cambió su sede habitual para emplazarse en los exteriores del capitalino santuario del cerro San Cristóbal, se llevó a cabo una oración en homenaje a los más de 12.000 fallecidos por COVID-19 desde la llegada del virus al país austral el pasado mes de marzo.
Como conmemoración, durante la misma jornada el presidente Sebastián Piñera se reunió con su gabinete en la sede del Gobierno chileno, el Palacio de la Moneda.
El acto, mucho más austero que otros años debido a las restricciones sanitarias, concluyó con la tradicional fotografía de las autoridades que posaron cumpliendo los protocolos de distanciamiento físico y uso mascarillas.
La ceremonia no contó con el tradicional «esquinazo», en el que un grupo folclórico baila un pie de cueca, la danza nacional del país.
Chile celebra este año las Fiestas Patrias más austeras en décadas debido a la pandemia, que ha obligado a las autoridades a suspender todos los actos y celebraciones populares y a establecer protocolos sanitarios especiales para este fin de semana.
