Opinión
Si bien es un gran logro que la prensa internacional reconozca a nuestro país en esta materia, podemos decir que hace años en Chile los emprendedores sociales están trabajando duro y han dado bastante de qué hablar.
A mediados de septiembre, quizás por el frenesí de las Fiestas Patrias, una gran noticia pasó inadvertida. Sucede que BBC (considerado uno de los medios más prestigiosos del mundo) publicó un artículo donde dio cuenta de que “Chile era el mejor país de América Latina para ser emprendedor social”.
La afirmación estaba lejos de ser antojadiza. Los resultados se desprenden del estudio que realizó la Fundación Thomson-Reuters, el cual no solo consideró que Chile era la mejor nación en América Latina para los emprendedores sociales, sino que Santiago era la quinta ciudad en el mundo, precedida por Hong Kong, Nairobi, Berlín y Londres.
Para el Observatorio de Innovación de la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de Chile esto no es una novedad. Si bien es un gran logro que la prensa internacional reconozca a nuestro país en esta materia, podemos decir que hace años en Chile los emprendedores sociales están trabajando duro y han dado bastante de qué hablar. Hace poco realizamos en la FEN de la Universidad de Chile un interesante encuentro con José Miguel Moller de Al Gramo, quizás uno de los emprendimientos sociales más emblemáticos del último tiempo, que busca reducir el costo de vida de las familias de manera sustentable a través del empoderamiento de almaceneros de barrio y comunidades, mediante la innovación y cocreación.
Además, durante todo el 2016 hemos trabajado en un interesante proyecto con el objetivo de impulsar la cocreación de soluciones novedosas a las problemáticas más importantes de esa región, a fin de abrir la innovación social y su ecosistema a dos principales desafíos priorizados a través del levantamiento de información que realizamos previamente, estos fueron: Medio Ambiente y Recursos Naturales; y Educación y Capital Humano.
En ese contexto se creó una Plataforma de Innovación Social donde los ciudadanos podían subir su idea, recibir mentorías y con ellas cambiar los problemas que enfrentan cuatro provincias de la Región de Los Lagos: Palena, Chiloé, Osorno y Llanquihue. La participación en la Plataforma fue altísima. Logramos que en un breve lapso se subieran más de 200 ideas.
Los próximos 16 y 17 de noviembre tenemos un gran hito de este proyecto. Hemos organizado una Cumbre de Innovación Social y Economías Creativas en Puerto Montt, en conjunto con diversas organizaciones de la región, entre las cuales figuran Balmaceda Arte Joven, Ambiter, Urbanismo Social, Universidad de los Lagos, Sembrando Verde, Cowo, entre otros. No solo esperamos una alta convocatoria, así como reconocer las mejores ideas; sin embargo, lo más vital de este encuentro es que la región se unirá en torno al tema de la Innovación Social. En ese sentido, todos quienes hemos participado logramos aportar con un grano de arena para incentivar a los cientos de emprendedores sociales que pudimos identificar en la zona y de quienes saldrán también cientos de nuevos proyectos que darán mucho de qué hablar.
Por eso, cuando el estudio de la Fundación Thomson-Reuters destaca a Chile en este mapa de la Innovación Social, no solo concordamos plenamente, también nos sentimos parte de ese grupo que busca apoyar a que las comunidades busquen continuamente soluciones a sus propias problemáticas sociales, esencia del emprendimiento social.
Juan Pablo Torres
Director del Observatorio de Innovación de la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de Chile.
PhD en Estrategia de la Universidad de Warwick.
Director del Proyecto NESIS-Los Lagos
