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Las luces y sombras de la propuesta de los empresarios para reformar las pensiones En propuesta de la CPC, las AFP no se tocan y se subiría a 67 años edad de jubilación

Las luces y sombras de la propuesta de los empresarios para reformar las pensiones

Asociación de AFP pone en duda de que parte del aumento en la cotización que propone la CPC sea voluntario. El gerente general de la asociación de administradoras, Fernando Larraín, valoró que el empresariado se haya sumado al «gran acuerdo nacional» convocado por la Presidenta y tuvo reacción positiva a que la tasa de cotización propuesta se acerque a los niveles internacionales. Gobierno valoró propuesta, pero no tiene certeza de si mejora tasa de reemplazo para clase media, al tiempo que cuestionó que el aumento en tasa de cotización sea destinado completamente a las cuentas individuales.


Este martes, la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) puso sus cartas sobre la mesa en el debate por mejorar las pensiones de los chilenos.

En su propuesta, que aúna 22 medidas para elevar las jubilaciones, pero manteniendo intacto el sistema de AFP, despuntan aquellas respecto a igualar la edad de jubilación de los trabajadores y trabajadoras a 65 años y, luego, elevarla a 67, así como aumentar la cotización de los afiliados, de 10% a 13%, a lo que se sumarían 2 puntos porcentuales, ambos por parte del empleador, si el trabajador decide voluntariamente cotizar un punto porcentual adicional, lo que sumaría un 16%.

La reacción en general fue positiva, aunque tanto las AFP como el Gobierno tuvieron cuestionamientos a varios puntos de la propuesta.

El gerente general de la Asociación de AFP, Fernando Larraín, tuvo reacciones agridulces.

Por un lado, el representante del gremio de administradoras valoró las propuestas y que los empresarios «se hayan sumado al llamado de la Presidenta a construir un acuerdo nacional, y esperamos que la propuesta que entregó la CPC, así como las que han entregado otros actores, nos ayuden a construir el pacto nacional para mejorar las pensiones de los trabajadores de Chile».

Larraín señaló que «poder llevar la comisión a un 16% se va a acercando cada vez más a las cotizaciones que tienen los países más desarrollados, dados los problemas que enfrentan, que son los mismos de nosotros, que estamos viviendo más años, que las tasas de interés están yendo a la baja y están repercutiendo en el ahorro, entonces llegar a la tasa (de cotización) de los países desarrollados nos parece bastante bien».

Destacó además que las medidas mantienen el sistema y los aumentos se sumarían a las cuentas individuales: «Nosotros creemos que es muy importante que cualquier aumento que haya, vaya a las cuentas individuales de los trabajadores».

Donde no concuerda Larraín es en la voluntariedad del punto porcentual que quedará bajo responsabilidad de los cotizantes.

Apuntó a que concretarlo es «complejo, dada la realidad salarial que tiene nuestro país. Ojalá que podamos ahorrar más», agregando, frente a la posibilidad del 1% voluntario, que en los países desarrollados la cotización es obligatoria.

«Tiene que haber un aumento en la tasa de cotización, y ese aumento tiene que ser parte del empleador. Hacerlo obligatorio haría que los trabajadores coticen 1% más y los empleadores un 5%», apuntó

Añadió que «las condiciones del mercado laboral probablemente no son las mejores para poder avanzar en esa línea, pero lo que podemos hacer es avanzar hacia tener unas tasas de cotizaciones que vayan acordes con nuestra longevidad, nuestra realidad  de tasas de interés. Creemos que las cotizaciones, para que se transformen en pensiones en el futuro, deben ir a las cuentas obligatorias».

En ese sentido, señaló que «la propuesta de la CPC propone un 16% con muchos otros ‘peros’. Hay que avaluar la propuesta de la CPC en su conjunto, y no ir aislando».

Frente a los comités de vigilancia que señala la CPC, «nosotros creemos que tenemos que buscar mecanismos, de compartir poder con los afiliados, y en esa línea hay posibilidades de hacerlo con un comité de vigilancia», entre otros, pero insiste en que hay que conocer mayores detalles.

«Hoy día existe una comisión de usuarios donde participan los trabajadores y tenemos que fortalecerla, y también creemos que tenemos que trabajar y avanzar en nuestros estándares de transparencia», concluyó.

Pormenores de las propuestas del empresariado

Las propuestas reveladas este martes por la CPC dejaron en claro que no tocarían el sistema actual de capitalización individual, declarando que sus medidas no buscan «modificar la estructura del sistema actual», sino realizar «cambios en los parámetros establecidos».

La comisión que elaboró las propuestas estuvo integrada por Alberto Salas (presidente de la CPC) y los especialistas Hernán Cheyre, Álvaro Clarke, Joanna Davidovich, Augusto Iglesias, Cristián Marcó, Patricio Parodi, Klaus Schmidt-Hebbel, Andrea Tokman, Sergio Urzúa y María José Zaldívar.

El Gobierno, a través del ministro de Hacienda, valoró propuestas, pero duda acerca de si mejora tasa de reemplazo para clase media, “porque si algo ha ido saliendo de manera bien consistente en nuestras discusiones en la mesa técnica con los partidos políticos, es que el problema principal que tenemos hoy son las tasas de reemplazo de la clase media”.

Rodrigo Valdés también cuestionó que el aumento en la tasa de cotización sea destinado completamente a las cuentas individuales. “Desde el comienzo sabemos que hay personas que piensan que todo esfuerzo extra debiera ir a una cuenta individual, otras que piensan que todo debiese ser reparto. Hay que buscar un intermedio”.

Reiteró que un sistema “que reparta demasiado no es sostenible, no podemos hacer un sistema que en 20 años más esté quebrado. Eso significa una carga para el fisco, para la cual no tenemos fondos”. Añadió que si esas cotizaciones adicionales van solo a cuentas individuales, significa que las generaciones que ya se retiraron o que lo harán en los próximos años “verían prácticamente inalteradas sus jubilaciones y eso tampoco es un equilibrio, ni técnico ni político, en lo que estamos haciendo”.

Valdés asimismo criticó el hecho de que la propuesta “es bastante generosa con fondos fiscales porque financia varias prestaciones a través de fondos fiscales, y hoy día no estamos para eso”.

El detalle de las 22 propuestas de la CPC es el siguiente:

1. Aumentar gradualmente en un 3% la tasa de cotización obligatoria con cargo al empleador.

2. Crear un nuevo mecanismo para promover el ahorro voluntario colectivo, que obliga a que el empleador ofrezca al trabajador un aporte de 2% adicional. Si este acepta, debe contribuir con un 1%. El 3% extra va a la cuenta individual y, sumado a la propuesta anterior, da lugar a una tasa de cotización total de 16%.

3. Mayor flexibilidad en la regulación del ahorro voluntario.

4. Aumentar gradualmente la edad de jubilación, equiparando la de las mujeres a la de los hombres en 65 años y, en una segunda etapa, incrementando ambas hasta los 67.

5. Crear una entidad permanente para revisión periódica de los parámetros del sistema previsional.

6. Incorporar gradualmente a los trabajadores independientes al sistema previsional.

7. Mejorar la fiscalización del pago de cotizaciones previsionales, creando la “Dirección de Seguridad Social” en la Dirección del Trabajo.

8. Limitar los componentes no imponibles de las remuneraciones de los sectores público y privado.

9. Reducir las lagunas previsionales durante periodos de cesantía, extendiendo el pago del 10% por cotizaciones a las cuentas de AFP a todos los beneficiarios del seguro de cesantía, por un periodo mientras estén desempleados, sea que accedan o no al Fondo Solidario.

Para mejorar las pensiones de los más vulnerables:

10. Aumentar la Pensión Básica Solidaria un 15% y la Pensión Máxima con Aporte Solidario un 17%, por sobre el 10% recientemente aprobado.

11. Eliminar desincentivos a la cotización en programas sociales.

12. Igualar fórmula de cálculo de las pensiones de invalidez y vejez.

Para mejorar las pensiones de los actuales jubilados y de quienes están prontos a jubilar:

13. Crear la “Pensión de la cuarta edad” dentro del Pilar Solidario, recalculando las pensiones autofinanciadas de los beneficiarios con una expectativa de vida hasta los 85 años. Esto permitiría mantener las pensiones posteriores a esa edad en un monto similar al que venían recibiendo previamente.

Para mejorar las pensiones de las mujeres:

14. Crear una bonificación para la mujer acotada al 60% más vulnerable de la población y financiada con recursos del Pilar Solidario.

Para mejorar la eficiencia y competencia del sistema previsional:

15. Revisar el modelo de cobro de comisiones.

16. Crear Comités de Vigilancia en cada AFP.

17. Mayor y mejor educación previsional.

Para perfeccionar el mercado laboral:

18. Mayor flexibilidad laboral.

19. Crear un mecanismo no discriminatorio y de mayor cobertura de sala cuna.

20. Permitir que los adultos mayores que quieran trabajar no pierdan los beneficios sociales.

21. Mejor articulación entre el mundo formativo y productivo en materia de capital humano.

22. Racionalizar los programas públicos de capacitación e inserción laboral.

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