Publicidad
El plan de shock del Chicago Boy que dirige las finanzas de Brasil MERCADOS

El plan de shock del Chicago Boy que dirige las finanzas de Brasil

El nuevo ministro de Economía de Brasil esbozó una amplia revisión del aparato estatal y el entorno empresarial del país para liberar el potencial corporativo y, asimismo, a las futuras generaciones de la deuda. «El gasto excesivo ha corrompido a Brasil», dijo.


En un discurso en su ceremonia de juramento en Brasilia el miércoles, Paulo Guedes, el nuevo ministro de Economía de Brasil, dijo que el nuevo gobierno dará prioridad al recorte de los gastos de pensiones, la venta de activos estatales y la simplificación de un complejo sistema tributario.

«Piratas del sector privado, burócratas corruptos y criaturas del pantano político han conspirado contra el pueblo brasileño», dijo. «El gasto excesivo ha corrompido a Brasil».

El discurso se produce en medio de un renovado optimismo de que el presidente entrante, Jair Bolsonaro, podrá implementar las medidas pro mercado que había prometido.

La bolsa de valores de referencia subió hasta un 4,1 por ciento el miércoles, mientras que las verdaderas ganancias globales entre las monedas muestran que el gobierno está ampliando los planes para privatizar y podría tener más apoyo en el Congreso del que se esperaba.

En el primer ejemplo concreto del compromiso del nuevo gobierno con el gobierno reducido, el Jefe de Estado Mayor de Bolsonaro, Onyx Lorenzoni, dijo el miércoles que despediría a unos 300 funcionarios públicos comisionados y que otros ministerios podrían seguir su ejemplo.

Luego de un proceso de selección para deshacerse de los oficiales partidistas, algunos podrían ser contratados nuevamente, dijo.

Bolsonaro eligió a Guedes, un graduado de la Universidad de Chicago, para administrar la política económica en un país paralizado por el aumento de la deuda, un déficit fiscal enorme y un crecimiento lento. Bolsonaro ganó las elecciones de octubre por un amplio margen como parte de una reacción popular contra el crimen, la corrupción y el malestar económico.

En sus comentarios del miércoles, Guedes destacó la urgencia de la tarea por delante. «Nuestra clase empresarial está encadenada por las tasas de interés, los altos impuestos y los costos laborales», dijo, y agregó que creía que la carga fiscal ideal sería alrededor del 20 por ciento del producto interno bruto, en lugar de la tasa actual del 36 por ciento.

Publicidad

Tendencias