Una fuerte ralentización de la actividad manufacturera de China es una señal de alerta para el Gobierno para no endurecer las condiciones monetarias demasiado rápido, según el economista jefe para el país de HSBC, HSBA.LN -1.48% Qu Hongbin.
HSBC y Markit publicaron el jueves una encuesta que muestra que las condiciones del sector manufacturero chino se deterioraron en enero por primera vez en seis meses. El Índice de Gestores de Compra –PMI, por sus siglas en inglés– adelantado se situó en 49,6, por debajo del nivel de 50 que separa la expansión de la contracción.
Para Qu, estos datos muestran los peligros de la decisión de China de endurecer el crédito por sus preocupaciones sobre el endeudamiento fuera de balance de los gobiernos locales.
Una ralentización de la inversión de las empresas de sectores como el inmobiliario y las infraestructuras se tradujo en unos menores pedidos para el sector manufacturero. Además, los pedidos de exportaciones no han repuntado aún, debido a la débil demanda de los consumidores de Europa y Estados Unidos.
El riesgo de un aumento generalizado de los tipos de interés es una ralentización económica similar a la que China ya experimentó hace un año.
"Deberían ser conscientes de los riesgos", dijo Qu. "Yo trataría de lograr un equilibrio".
El dato adelantado del PMI de HSBC fue peor de lo que se esperaba.
