Algunos trabajos tienen mejor prensa que otros. Ya sea porque se ven cool, porque están de moda en un programa de televisión, porque un actor lo interpreta en tu película o serie favorita.
Al respecto, el medio británico Telegraph elaboró una lista con los 5 trabajos más sobrevalorados del mundo, de esos que, si le preguntaras a la gente que te mencione algunos, la probabilidades de que diga uno de la siguiente lista son muy altas.
Uno de aquellos probablemente sea el de abogado. En la TV los abogados se ven como aquellos genios de la oratoria, aunque –para favorecer la entretención– se deja a un lado el aburrido papeleo que deben llenar. Pese a esto, sigue siendo un gran trabajo: es bien remunerado, entrega prestigio y ofrece un constante progreso laboral.
Pero dejando fuera del mapa al anterior, hay trabajos “soñados” que se ven mucho mejor de lo que aparentan, sobre todo porque se olvida la brutal competencia, la posibilidad de que no te lleven a ningún lado o, incluso, que puedan destruir tu vida personal.
La lista está elaborada sobre la base de carreras con una gran percepción pública, en contraste con una realidad mucho menos atractiva.
1. Escritor de viajes
Muchos sueñan con ser un cronista de viajes, recorrer el mundo y descubrir sus maravillas para compartirlas con los demás. Pero se olvidan de algo: el dinero. La gran mayoría de los cronistas son periodistas, carrera que ha visto caer ostensiblemente los salarios en las últimas dos décadas. Eso, sin contar además que es muy probable que, al ser la mayoría freelance, debes pagar los pasajes, estadías, por tanto, es muy probable que tu mapa de posibilidades se reduzca un poco.
Si trabajas con contrato, probablemente no te enviarán a cubrir los lugares de tus sueños, y ciertamente terminarías siendo más bien un relacionador público del lugar donde te inviten, ya que es probable que el medio en que trabajes querrá abaratar costos. De hecho, tu vida terminará siendo algo más parecido a unas constantes vacaciones con gente que no conoces en lugares que no conoces, y que probablemente no te gusten.
Y, para rematar, lo que viene no se ve mejor, porque tu competencia serán los cronistas de Tripadvisor, que incluso harán tu pega gratis.
2. Chef
Ser chef definitivamente gana la competencia en la categoría “mala interpretación” al estar casi omnipresente en la TV.
El fetichismo que han generado programas como Master Chef, Top Chef o cualquier tipo de realidad manipulada o programas para fanáticos de la comida, han convencido a la gente de que trabajar en una concina es un gran trabajo. Y no lo es.
Hace 15 años, y tal como lo inmortalizó el ya estelar Anthony Burdain en su libro Kitchen Confidential, ibas a trabajar a una cocina si tenías antecedentes penales, debido a que el trabajo es duro, por muchas horas y mal remunerado, y lo sigue siendo. Y la oportunidad de transformarse en el próximo chef masivamente conocido es cada vez más difícil, porque la fila para perseguir ese ideal es cada vez más larga. Así que mejor guardarse las habilidades con los cuchillos para impresionar a los amigos con una buena cena.
3. Publicista
Tal vez para mucho la industria de la publicidad sigue siendo un mundo cool. Y cómo no, después de 8 años de la alabada serie Mad Men, con hombres en la cima del mundo bebiendo whisky como si fuese agua.
Pero tal como los medios de comunicación, la industria publicitaria se ha resentido severamente en las últimas décadas y sus días de gloria parecen haber acabado hace mucho tiempo. Más aún, la globalización y el acceso a la tecnología le han quitado la diversión a la publicidad.
Para dejar las cosas aún más claras en este mundo que busca esa frase pegajosa de tres palabras, una encuesta del sitio norteamericano de profesiones, CareerCast’s, preguntó por la profesión más sobrevalorada. Adivinen el resultado: ejecutivo de cuentas publicitarias fue elegida como la carrera más sobrevalorada de todas.
4. Arquitecto
Quién no ha tirado brillantes líneas sobre una servilleta esperando que ese boceto se transforme en un edificio jamás construido, que deje boquiabiertos a quienes lo visiten. Pues bien, imagina la competencia en una carrera que es profundamente sensible y volátil al más mínimo movimiento en la economía. Y no olvides que demorarás entre 6 y 7 años en obtener tu título (sí, casi lo mismo que medicina, pero sin su sueldo).
5. Junior Investment Banker
Este es el primer paso de un camino que puede llevarte a la cima de una montaña de dinero. O por lo menos eso es lo que se piensa. El comienzo de esta particular senda es más difícil, estresante y aburrida de lo que cualquiera podría imaginar, según sus protagonistas.
Lo común sería pasar unas cuantas semanas (meses, años) fotocopiando documentos, para luego ascender a hacer negocios.
Pues no, en realidad estarás haciendo el trabajo de trinchera a aquellos que llevan en el negocio más años que tú. De hecho, tu vida no te pertenecerá, estarás a su servicio y nada será más importante que el trabajo. 90 horas semanales será la norma.
La relaciones de pareja y amistades serán destruidas, ya que es muy común que los banqueros terminen congeniando sólo con aquellos que entiendan los desafíos puestos sobre sus hombros. O sea, básicamente, sólo banqueros.
