Otra marca más de lujo decide dejar el país y la principal razón argüida es el efecto de las trabas a las importaciones. Se trata de la emblemática joyería Cartier, situada en la Avenida Alvear, que se suma a la de la ropa interior Calvin Klein , y a las de indumentaria Yves Saint Laurent y Ermenegildo Zegna. Según trascendió el 31 de octubre cerrará sus persianas y en su reemplazo abrirá la boutique Design Destrict.
Al igual que muchas empresas internacionales de otros rubros, las compañías se vieron obligadas a presentar proyectos para exportar y así compensar las importaciones. Pero no se trata sólo de las restricciones a las importaciones sino también una fuerte caída en el nivel de ventas y a las exigencias que mantiene la AFIP sobre el eslabón comercial.
La atracción de las grandes marcas por el mercado argentino a raíz de la capacidad de compra de los consumidores está mermando frente a la desaceleración de la economía y a la decisión oficial de frenar importaciones. A pesar de esto, algunas marcas tratan de buscar algo positivo en este contexto. «Es cierto que están faltando muchos productos y esto afecta el corazón del negocio», comentó la dueña de otra joyería Premium, a Clarín.
La compañía francesa, fabricante de relojes y joyas desde hace más de 100 años, ya comenzó a comunicarles la decisión a sus clientes locales. Cartier es dueña también de la marca Montblanc, más vinculada al negocio de las lapiceras pero que se introdujo en el mundo de las joyas desde 1997.