Chile en Copa América: ¿la quinta será la vencida?

1955, final con tragedia: en el quinto torneo disputado en suelo nacional la selección chilena logró destacar desde las primeras fechas. Eran épocas donde el campeonato sudamericano se disputaba con formato de liguilla todos contra todos. Esa vez participaron seis selecciones y nuestro representativo comenzó su andar con tranco goleador y arrollador ganando 7-1 a Ecuador y 5-4 a Perú.

Ni el decepcionante empate 2-2 con Uruguay privó a los nacionales de soñar con la hazaña de quedarse con la copa. El 5-0 sobre Paraguay en la penúltima fecha hizo llegar a chilenos y argentinos en igualdad de condiciones a la jornada final: 7 puntos. Sin embargo, el partido del 30 de marzo en el Estadio Nacional quedó en la memoria colectiva no por el resultado final (triunfo albiceleste por la cuenta mínima), sino que por el trágico saldo de seis muertos en medio de una pavorosa estampida en busca de entradas, en la previa del cotejo.

1956, nuevamente cerca: Con el aval del subcampeonato del torneo anterior, Chile desplegó nuevamente un gran juego en tierras uruguayas. Cabe señalar que la combinación de resultados de la penúltima fecha dejó a la selección sin opciones de disputar el título (que fue para los locales), pero ofreció la enorme posibilidad de abrochar el segundo lugar, por sobre Argentina, que llegó a Montevideo como campeón defensor. Una brillante exhibición en el debut ante Brasil se tradujo en un histórico 4-1. Y pese a caer con Argentina y Uruguay en fechas sucesivas, la irregularidad de los albicelestes, sumada con los triunfos de la Roja ante Perú y Paraguay, permitieron repetir el logro e imponerse incluso a Brasil en el cómputo final. Enrique “Cua Cua” Hormazábal fue el goleador del torneo, lo cual puso a esta selección en la galería de los grandes equipos chilenos de la historia.

1979, a un gol de la copa: con un formato de grupos, la Copa América de este año permitió a la escuadra nacional, dirigida por Luis Santibáñez, disputar la primera finalísima de su historia. Tras sortear un triangular con Colombia y Venezuela, en el cual Chile prevaleció ante los cafeteros por diferencia de goles, en semifinales se eliminó a Perú, incorporado en esa fase por ser campeón vigente. Un brillante Carlos Caszely en Lima prodigó los dos goles del triunfo chileno, que fue refrendado con una igualdad 0-0 en Santiago, cuando fue expulsado Elías Figueroa, sensible baja para el primer duelo de la final ante Paraguay, que había eliminado a Brasil en semifinales.

Los partidos con los guaraníes fueron de alta tensión: el 3-0 en Asunción fue respondido con un apretado 1-0 en Santiago. Los triunfos de los locales hicieron necesaria una definición en cancha de Vélez Sarsfield, en Buenos Aires, donde el 0-0 que se extendió tras 120 minutos de juego le entregó la copa a Paraguay, a raíz de su mejor cosecha de goles. Nuevamente al consuelo del subcampeonato se sumó el contar con el goleador del torneo, Jorge Peredo con 4 goles. Carlos Caszely fue elegido el mejor jugador del certamen.

1987, decepción en Buenos Aires: la primera edición del actual formato del torneo se disputó hace 28 años en Argentina. Tres grupos que entregaron a un clasificado a semifinales, donde se unió Uruguay, como campeón de la edición 1983. En su grupo, Chile derrotó a Venezuela por 3-1 y goleó sorpresivamente 4-0 a Brasil, mostrando sus credenciales para incluso alzar el trofeo. En semifinales, ante Colombia, fueron necesarios 120 minutos para sellar el 2-1 de los nacionales y llevarlos a disputar una nueva final continental.

El domingo 12 de julio de 1987, en el Monumental de Núñez, chilenos y uruguayos disputaron un friccionado encuentro, en el que prevaleció el oficio de los orientales, que aprovecharon la única ocasión en que falló Roberto Rojas en el certamen: el minuto 55, cuando Pablo Bengoechea capitalizó un rebote en el área chica del meta chileno, convirtiendo el único gol de la final. Fue el inicio de 28 años de espera que tuvieron incluso una escala en Chile, en 1991, pero que no volvieron a saber de la selección nacional disputando la final del torneo de selecciones más antiguo del planeta.