La OEA aprobará hoy una Declaración -que no implica la toma de ninguna acción inmediata- en la que expresa su voluntad de «facilitar el diálogo como medio para superar la crisis y garantizar la preservación de las instituciones democráticas», mientras Venezuela niega estar tras la crisis.
La Organización de Estados Americanos (OEA) expresará hoy su disposición a brindar «toda la cooperación» que le soliciten las «legítimas autoridades bolivianas» pero, aparentemente, no irá más allá.
La OEA, según ha podido constatar EFE en distintas fuentes en esta Asamblea General, aprobará hoy una Declaración -que no implica la toma de ninguna acción inmediata- en la que expresa su voluntad de «facilitar el diálogo como medio para superar la crisis y garantizar la preservación de las instituciones democráticas».
En el texto de la Declaración, al que ha tenido acceso EFE, se reconocen «los esfuerzos del presidente Carlos Mesa para llevar adelante el proceso de manera consensuada».
En el texto de la Declaración al que ha tenido acceso EFE, se reconocen «los esfuerzos del presidente Carlos Mesa para llevar adelante el proceso de manera consensuada».
Se destaca también la «generosidad» del presidente Mesa al poner su cargo a disposición del país para permitirle avanzar hacia una solución pacífica.
En la Declaración se lamenta también «el agravamiento de la crisis política en Bolivia que ha llevado al Presidente Mesa a presentar su renuncia ante el Congreso de la República».
En el documento, consensuado con el secretario general, José Miguel Insulza, y con las delegaciones de los 34 países miembros de la OEA, se expresa «la necesidad de que la renuncia del presidente de Bolivia sea considerada dentro de los cauces normativos establecidos en su constitución».
Se hace, además, un llamamiento «a todos los sectores del proceso político boliviano para que, a través del diálogo y respetando los derechos humanos, puedan superar con prontitud la presente crisis, de conformidad con las disposiciones constitucionales aplicables, preservando la democracia y garantizando la unidad de Bolivia».
Bolivia ha rechazado hasta el momento cualquier intento de mediación externa para solucionar los graves problemas que tiene planteados y su posición no ha cambiado hoy, después de que ayer, lunes, Mesa presentara su dimisión.
La OEA, por tanto, se va a limitar a aprobar esta Declaración en la que ofrece «toda la cooperación» a Bolivia para la solución de su crisis.
«Este es un asunto sumamente delicado que debemos aceptar con tranquilidad, pero no es posible pensar que la OEA no haga nada. Hay que hacer una declaración en las líneas que ha pedido el señor canciller de Bolivia (Juan Ignacio Siles)», dijo Insulza hoy al comienzo de la sesión de la XXXV Asamblea General.
Siles informó a los 34 cancilleres que participan en la XXXV Asamblea General que Mesa renunció y pidió apoyo a quien «constitucionalmente» asuma la Presidencia del país.
Venezuela niega estar detrás de crisis boliviana
El canciller de Venezuela, Alí Rodríguez, rechazó hoy categóricamente una intromisión de su Gobierno en la crisis de Bolivia que condujo al presidente de ese país, Carlos Mesa, a presentar el lunes la renuncia.
El secretario de Estado Adjunto para Latinoamérica de EEUU, Roger Noriega, dijo hoy, en el marco de la XXXV Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), que desde hace tiempo «es obvio» el perfil del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en la crisis de Bolivia, lo cual, agregó, es «realmente preocupante».
Al negar esas acusaciones, el ministro venezolano afirmó en una rueda de prensa que Noriega sigue «buscando echar leña al fuego cuando los diplomáticos deben apagarlo».
Rodríguez, que enfatizó que Venezuela es «escrupulosamente respetuosa» de la soberanía de Bolivia y de cualquier país, negó que Caracas apoye económicamente al líder del Movimiento Al Socialismo (MAS) y dirigente cocalero boliviano Evo Morales.
«No. Indignadamente, no», recalcó al ser preguntado al respecto en una rueda de prensa, en la que también negó que un agregado militar venezolano destacado en La Paz fuese expulsado del país durante las revueltas que provocaron en 2003 la salida del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada del poder.
«Desde Estados Unidos se dicen muchas cosas. No las crea», dijo.
El canciller subrayó que «sería absurdo» acusar a su Gobierno de la crisis de Bolivia, la cual, destacó, tiene un largo proceso y se ha expresado con distinta intensidad en diferentes momentos.
Rodríguez recalcó que las «escasas» reuniones de representantes del Gobierno venezolano con ciudadanos bolivianos han sido siempre a solicitud de éstos.
«El respaldo a Mesa no está en discusión bajo ningún concepto», señaló al insistir una vez más en la política venezolana de no injerencia en los asuntos internos de otros países.
«Los problemas de los bolivianos son de ellos», recalcó.
El ministro destacó que en esta asamblea de la OEA hay una «posición única» de apoyo al Gobierno boliviano y se refirió a la declaración que la reunión aprobará hoy reiterando la disposición del foro regional a cooperar con las autoridades legítimas para buscar una solución a la crisis cuando así lo solicite La Paz.
Dijo que el Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) y la Comunidad Andina de Naciones (CAN, Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú y Bolivia) también preparan sendas declaraciones de apoyo al Gobierno de Bolivia.
EFE
