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Ortega llama a dialogar a colegas de Colombia, Ecuador y Venezuela

Presidente de Nicaragua Ortega dijo que hay abierta una propuesta de diálogo entre Colombia, Venezuela, Ecuador y Nicaragua y que él está dispuesto a realizar este acercamiento y zanjar definitivamente las diferencias, acentuadas por la incursión militar colombiana en Ecuador.


El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, hizo este miércoles un llamado a sus colegas de Colombia, Ecuador y Venezuela para resolver sus diferencias a través del diálogo y repitió que la guerra en Colombia y el narcotráfico ponen en peligro a la región.



El presidente nicaragüense hizo estas declaraciones en una base naval salvadoreña en el Golfo de Fonseca, en el océano Pacífico, donde se reunió con los presidentes de El Salvador, Elías Antonio Saca, y de Honduras, Manuel Zelaya.



Ortega declaró que hay abierta una propuesta de diálogo entre Colombia, Venezuela, Ecuador y Nicaragua y que él está dispuesto a realizar este acercamiento y zanjar definitivamente las diferencias, acentuadas por la incursión militar colombiana en Ecuador.



El pasado1 de marzo tropas colombianas realizaron una operación militar en territorio ecuatoriano contra un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), donde murió «Raúl Reyes», el vocero internacional de esta guerrilla.



La acción militar motivó el rompimiento de relaciones diplomáticas de Nicaragua y Venezuela con Colombia, en apoyo a Quito.



Ortega dijo que el «mensaje que le hacemos al hermano pueblo colombiano, al hermano pueblo ecuatoriano, al presidente (de Ecuador, Rafael) Correa (…) y al presidente (de Colombia) Álvaro Uribe es que dialoguemos».



«Tenemos una propuesta de diálogo», afirmó Ortega y llamó a sus colegas de los tres países sudamericanos a realizar próximamente una reunión.



«Realmente yo estoy dispuesto a participar en esta reunión para que podamos darle más fortaleza a ese llamado a la paz y no a la confrontación», dijo el presidente.



Los presidentes Ortega, Saca y Zelaya recibieron este miércoles un informe de los avances del proyecto que declarará al común Golfo de Fonseca como una zona de paz, seguridad y desarrollo sostenible.



El gobernante nicaragüense dijo que esta actividad manda un mensaje de paz desde Centroamérica al tiempo que indicó que «desgraciadamente todavía en Colombia está aún un conflicto que afecta, en primer lugar, a los países vecinos».



Destacó los gestos de buena voluntad mostrados por los presidentes en la reunión del Grupo de Río, celebrada en República Dominicana el pasado 6 de marzo, ya que las aspiraciones de paz del continente pasaron «su prueba de fuego».



Ortega aseguró que, a parte de la guerra, Colombia «es el país que se ha convertido en el principal punto de partida del narcotráfico y por lo tanto del crimen organizado».



«Allí se originan dos situaciones que amenazan la paz y la seguridad regional, no solamente de los países vecinos de Colombia» sino también del resto de los países, señaló el presidente de Nicaragua.



Enfatizó que esta situación afecta principalmente a los países de Centroamérica, cuyos mares son usados por los cárteles de la droga para transportarla a Estados Unidos.



En la misma comparecencia, el presidente salvadoreño llamó a los Gobiernos de Nicaragua y Colombia a resolver por la vía «pacífica» un histórico conflicto limítrofe en el mar Caribe.



Nicaragua denunció recientemente a Colombia ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) por insistir en que el meridiano 82 es frontera marítima entre ambos países, pese a que la Corte Internacional de Justicia de La Haya, en su resolución, determinó que aún no están fijadas las coordenadas exactas.



Sobre este aspecto, Zelaya informó que invitó a Ortega para que el próximo 11 de abril visiten juntos diversas zonas del Caribe de Honduras y Nicaragua y hacer «las reflexiones necesarias para buscar esa unidad y esa paz en el Caribe».



El presidente hondureño agregó que la propuesta hecha a Uribe por Ortega para pactar una reunión de diálogo «puede ser recogida de muy buena voluntad» por el presidente colombiano.



EFE

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