Publicidad

Morales entrega recursos en región tensionada por consulta autonómica

Desde su llegada al aeropuerto de Cobija, situada en la frontera con Brasil, Morales fue recibido por sus bases, que organizaron una larga caravana de vehículos hasta el lugar de la concentración y que lanzaron «vivas» a su Gobierno y consignas de rechazo al referendo autonómico.


El presidente de Bolivia, Evo Morales, entregó este viernes recursos y una donación de ambulancias de España en la región de Pando, donde existe tensión por el temor a posibles enfrentamientos el domingo cuando se celebrará un referendo autonómico organizado por la oposición.



El mandatario repartió en Cobija, capital de Pando, cheques para proyectos productivos, anunció inversiones para el asfaltado de calles y carreteras y entregó doce ambulancias donadas por España -lo que agradeció al presidente José Luis Rodríguez Zapatero- en un acto ante unos dos mil de sus seguidores, en el centro de esta pequeña ciudad.



Desde su llegada al aeropuerto de Cobija, situada en la frontera con Brasil, Morales fue recibido por sus bases, que organizaron una larga caravana de vehículos hasta el lugar de la concentración y que lanzaron «vivas» a su Gobierno y consignas de rechazo al referendo autonómico.



No obstante, al iniciar su discurso sostuvo que su presencia no era parte de una campaña política, sino para «hacer gestión y trabajo» por Pando, como lo hizo también en la vecina Beni.



Las regiones de Pando y Beni celebrarán el domingo varios referendos para validar unos estatutos autonómicos que el Ejecutivo desconoce y que tacha de «separatistas», denuncia que rechazan los líderes que han promovido estas consultas.



Los prefectos de esas regiones, el pandino Leopoldo Fernández y el beniano Ernesto Suárez, encabezaron la noche del jueves el cierre de sus campañas a favor el «sí» a esos referendos.



Morales cree que la oposición persigue sacarlo del Gobierno y frenar sus reformas con esos procesos autonómicos, que ha liderado el próspero departamento de Santa Cruz, cuyo estatuto autonómico fue aprobado en una consulta popular el pasado 4 de mayo.



Tras Beni y Pando, será la región de Tarija (sur) la que celebre otro referendo autonomista el próximo 22 de junio.



«Los grupos que no quieren cambio tal vez tumbarán al indio pero no podrán tumbar al pueblo», dijo el gobernante indígena que poco antes expresó que se sentía más querido en el exterior, que dentro de su país.



Su llegada a Cobija, una ciudad con notoria presencia de descendientes del occidente del país, fue percibida en algunas personas como un signo de tensión adicional porque «parece que todo pende un hilo» ante el referendo, según dijo un empresario hotelero.



Y es que en los últimos días ha habido al menos dos incidentes de violencia entre seguidores y opositores, y los campesinos del municipio de Filadelfia mantienen cortada una ruta para impedir que la Corte Departamental Electoral reparta urnas.



La policía reforzó su presencia en Cobija desde el pasado jueves para evitar enfrentamientos ante el anuncio de que se han formado «guardias civiles» de mototaxistas y universitarios para evitar que se sabotee la consulta del domingo.



También denunciaron la presencia del grupo radical Unión Juvenil Cruceñista que en la ciudad de Santa Cruz, el pasado 4 de mayo, se enfrentó a oficialistas que frenaron la consulta en los barrios progubernamentales.



Al término del acto, el alcalde de Cobija, Luis Flores, afín a Morales, dijo que, si bien hay sensación de tensión, espera que finalmente el domingo no se produzca ningún choque y la jornada transcurra con tranquilidad.



Flores, que es uno de los opositores al referendo autonómico, cree que el próximo domingo habrá una notoria e «importante abstención» para rechazar esos estatutos que, a su juicio, fueron redactados de forma «excluyente» y no reflejan la verdadera demanda de autonomía pandina.

Publicidad

Tendencias