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Crece conflicto del Mercosur y los británicos por impedimento para embarcaciones con bandera de las Malvinas

Argentina reivindicó este martes la decisión luego que el canciller británico, William Hague, considerara la medida como un «bloqueo comercial». La Cancillería trasandina detalló que el jefe de la diplomacia británica reconoció ante el Parlamento de su país la existencia de esta medida e informó «que luego de hablar en dos oportunidades con el canciller uruguayo, Luis Almagro, y de varias gestiones ante los gobiernos de Chile y Brasil, ha quedado firme que los barcos que usaban el ilegítimo pabellón deberán reemplazarlo».


Mediante un comunicado publicado este martes el Ministerio de Relaciones Exteriores,  reiteró que “Chile continuará aplicando, conforme al Derecho Internacional y a la legislación chilena, las medidas destinadas a impedir que embarcaciones que naveguen con la bandera de las Islas Malvinas ingresen a los puertos nacionales”.

La Secretaría de Estado precisó que esta medida se adoptó “en cumplimiento con los compromisos adoptados en las declaraciones emitidas en el marco de la Reunión de la Unión de Naciones Suramericanas -Unasur, de 26 de noviembre de 2010 y de la reciente Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de Mercosur y Estados Asociados, de 20 de diciembre de 2011”.

Argentina reivindicó en la jornada la decisión adoptada por los países sudamericanos luego de que el canciller británico, William Hague, considerara la medida como un «bloqueo comercial».

La reacción del gobierno de Cristina Fernández se da ante «información periodística errónea que atribuía al canciller
británico William Hague haber logrado un cambio de posición regional respecto al impedimento de ingreso a los puertos de Brasil, Chile y
Uruguay de embarcaciones con la bandera ilegal de las Islas Malvinas», según explicaron en un comunicado.

La Cancillería trasandina argumentó que estas acciones «se encuadran en la defensa de los recursos naturales renovables y no renovables que pertenecen al pueblo argentino tal como lo reconocen, entre otros países, todas las naciones de la región».

El impedimento para el atraque de barcos con bandera de las islas en puertos del Mercosur, es compartido por los integrantes del Mercosur, Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, con Venezuela en proceso de adhesión plena, más sus países asociados, Chile, Ecuador, Perú y Colombia, además de Bolivia.

Según la Cancillería argentina, William Hague reconoció ante el Parlamento de su país la existencia de esta medida e «informó que luego de hablar en dos oportunidades con el canciller uruguayo, Luis Almagro, y de varias gestiones ante los gobiernos de Chile y Brasil, ha quedado firme que los barcos que usaban el ilegítimo pabellón deberán reemplazarlo».

El canciller argentino, Héctor Timerman, se comunicó este martes con sus colegas de Brasil, Chile y Uruguay, «quienes confirmaron que sus respectivos gobiernos no habían modificado su posición desde que se adoptara» la decisión regional, el mes pasado, «y que así fue transmitido al Gobierno del Reino Unido», según informó el Gobierno de Cristina Fernández.

«El canciller británico habló de la necesidad de respetar los principios de la Carta de las Naciones Unidas sin mencionar que el Reino Unido ha incumplido con 10 resoluciones de la Asamblea General y 29 resoluciones del Comité de Descolonización, que instan a ambos países a reiniciar las negociaciones», añade el comunicado argentino.

Este año se cumple el trigésimo aniversario de la guerra desatada el 2 de abril de 1982, cuando Argentina ocupó las islas. En el conflicto bélico murieron 255 militares británicos y más de 650 argentinos y concluyó el 14 de junio de ese año con la victoria de las tropas del país europeo.

El domingo el primer ministro británico, David Cameron, descartó una negociación con Argentina sobre la soberanía de ese territorio y dijo que su país debe mantener siempre la «vigilancia» de las islas del Atlántico Sur.

El mes próximo, el príncipe Guillermo -segundo en la línea de sucesión a la corona británica- viajará a las Malvinas para tomar parte de unos entrenamientos como piloto de helicóptero de rescate.

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