Joe Biden se muestra dispuesto a dialogar con Irán, incluso a negociaciones directas si hay «tiempo y espacio» para una diplomacia exitosa, aunque advierte de que «esa ventana no estará abierta de manera ilimitada».
El vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtió de que Washington no permitirá que Irán desarrolle armas nucleares y ha exigido que el Gobierno de Teherán retorne a la mesa de negociaciones para abordar su controvertido programa atómico.
«Impediremos que Irán disponga de un arma nuclear», afirma Biden en declaraciones hoy al rotativo Süddeutsche Zeitung con motivo del comienzo de la 49 Conferencia de Seguridad de Múnich, a la que asiste, al igual que el titular de Exteriores iraní, Ali Akbar Salehi.
El vicepresidente estadounidense se muestra dispuesto a dialogar con Irán, incluso a negociaciones directas si hay «tiempo y espacio» para una diplomacia exitosa, aunque advierte de que «esa ventana no estará abierta de manera ilimitada».
Las advertencias de EEUU coinciden con el anuncio hecho por Teherán al Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) de que piensa acelerar sus procesos para el enriquecimiento de uranio con la instalación de un mayor número de centrifugadoras modernas.
Biden califica de «amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos» el desarrollo potencial de armas atómicas por parte de Irán y subraya que su país está interesado en alcanzar una solución diplomática y está dispuesto a conversaciones bilaterales.
Asimismo comenta que las autoridades de Teherán «han incumplido sus compromisos internacionales» al obstaculizar el trabajo del OIEA, por lo que deben contar con que continúen «las sanciones paralizantes y una creciente presión», ya que la contención o disuasión ante una amenaza nuclear no es suficiente.
En cuanto al creciente poderío de China y las tensiones del gigante asiático con otros países de la región, Biden exige de todas las partes, también de aliados tradicionales de EEUU como Japón o Filipinas, que eviten toda actuación que socave la seguridad y el bienestar de la zona.
Además destaca que «si China quiere alcanzar el tránsito hacia una economía innovadora y un bienestar sostenido» debe abrir su sistema político y apostar por la defensa de los Derechos Humanos, la libertad de opinión, religión y asamblea y permitir el acceso sin límites a la información.
En cuanto a las dudas sobre la potencia del sistema occidental, el vicepresidente de EEUU afirma que «las sociedades abiertas y libres» son las mas adecuadas para fomentar el crecimiento y la estabilidad.
Joe Biden rechaza también los temores a que Estados Unidos se vuelque hacia el Pacífico y descuide sus compromisos con Europa al subrayar que las relaciones transatlánticas «son el pilar de nuestros compromisos en el mundo» y que «América fue y es una orgulloso potencia atlántica y lo seguirá siendo siempre».
