MUNDO
Fuente: BBC News
Una enorme explosión de gas en la capital de Kenia, Nairobi, ha dejado al menos tres personas muertas y cerca de 300 heridas.
Un camión que transportaba gas explotó en el distrito de Embakasi alrededor de las 23:30 (20:30 GMT), “enciendiendo una enorme bola de fuego”, según un portavoz del gobierno.
Viviendas, negocios y automóviles resultaron dañados, con videos mostrando un gran incendio cerca de edificios de departamentos.
La zona ha sido acordonada y se está llevando a cabo una investigación sobre la causa de la explosión.
Se informa que al menos una persona, un guardia en el lugar, ha sido arrestada en relación con el incidente, según la BBC.
Un niño se encuentra entre los fallecidos, según el jefe de policía de Embakasi, Wesley Kimeto, quien agregó que la cifra de muertos podría aumentar.
Un total de 271 personas fueron llevadas al hospital, incluyendo al menos 25 niños, según las autoridades.
El alcalde de Nairobi, Sakaja Johnson, indicó que muchos de los heridos fueron tratados y enviados a casa, pero al menos 39 fueron trasladados a otras instalaciones, algunos con lesiones graves.
Otras 27 personas fueron atendidas en el lugar por lesiones no mortales.
Inicialmente, el gobierno afirmó que la explosión ocurrió en una planta de gas donde se estaban recargando cilindros de gas, pero más tarde aclararon que un camión explotó en un estacionamiento.
Según el portavoz del gobierno, Isaac Mwaura, una bola de fuego se “expandió ampliamente”. Un cilindro de gas volador golpeó un almacén de ropa y textiles, quemándolo.
“El incendio dañó aún más varios vehículos y propiedades comerciales, incluyendo muchos negocios pequeños y medianos”, dijo en un comunicado.
“Trágicamente, las casas residenciales en el vecindario también se incendiaron, con varios residentes aún adentro, ya que era tarde en la noche”.
El incendio ha sido controlado y se ha lanzado una operación de búsqueda y rescate para determinar si hay personas desaparecidas o si simplemente han buscado refugio en otro lugar.
La Autoridad Reguladora de Energía y Petróleo (Epra) dijo en un comunicado que la planta de gas era ilegal y que había rechazado tres solicitudes de permisos de construcción para construir una instalación de almacenamiento y llenado en el lugar.
Epra dijo que los diseños no cumplían con sus estándares de seguridad y que había una alta población alrededor del sitio propuesto.
No está claro cómo la instalación aún pudo operar.
Mwaura, quien visitó el sitio, dijo que los propietarios de la empresa involucrada deben “compensar a las víctimas” y asumir “la plena responsabilidad” de la explosión.
“Es inmoral arriesgar las vidas de nuestros compatriotas por lucro”, agregó.
Alrededor de 10 camiones quedaron completamente quemados dentro del recinto donde ocurrió la explosión.
Un vehículo aterrizó en la parte superior de un edificio de departamentos a decenas de metros de distancia, destruyendo parcialmente la fachada del edificio.
Testigos le dijeron a la BBC que la explosión lanzó objetos, incluidos cilindros de gas y un contenedor de envío, al aire.
Jackline Karimi fue una de las cientos de personas heridas en Nairobi. Sufrió quemaduras en la mano derecha y el brazo hasta el hombro y en la pierna derecha.
“Vi a una mujer en llamas, pero no pudimos ayudarla. Todos estaban huyendo”, dijo Karimi.
Otra mujer que estaba en un departamento cerca de la escena de la explosión le dijo a la BBC que estaba tratando de localizar a su amiga. “Estaba embarazada y tenía un niño en la casa, que ahora está completamente quemada”.
Boniface Sifuna le dijo a la agencia de noticias Reuters que fue quemado por un cilindro de gas que explotó.
“Explotó justo frente a mí y el impacto me derribó y las llamas me envolvieron. Tengo suerte de ser lo suficientemente fuerte como para alejarme”.
James Ngoge, quien vive al otro lado de la calle donde ocurrió la explosión, le dijo a la agencia de noticias AFP que estaba en su casa en ese momento y “escuchó una enorme explosión”.
“Sentí como si fuera a derrumbarse. Al principio, ni siquiera sabíamos lo que estaba sucediendo, era como un terremoto.
“Tengo un negocio en la carretera que fue completamente destruido”.
El portavoz del gobierno, Mwaura, dijo que se estableció un centro de comando para ayudar a coordinar las operaciones de rescate.
“Se aconseja a los kenianos que se mantengan alejados del área acordonada para permitir que la misión de rescate se lleve a cabo con las mínimas interrupciones”, agregó.
Con reportes adicionales de Kathryn Armstrong y Thomas Mackintosh en Londres.
