
Ante un salón vacío de la ONU, Netanyahu dice que un Estado Palestino sería “suicidio nacional”
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, habló ante una Asamblea General de la ONU casi vacía tras el abandono de delegaciones en protesta. Rechazó un Estado palestino, al que calificó como un “suicidio nacional”, y defendió la ofensiva en Gaza.
El discurso de Benjamin Netanyahu este viernes en la Asamblea General de Naciones Unidas estuvo marcado por el vacío en la sala. Apenas tomó la palabra, decenas de representantes de distintos países abandonaron sus asientos en señal de protesta, dejando al primer ministro israelí frente a una sala semivacía.
El líder israelí se dirigió directamente a Hamás y exigió la liberación de los rehenes en Gaza. “No descansaremos hasta traerlos de vuelta a casa”, proclamó en hebreo y luego en inglés, advirtiendo que quienes no sean liberados serán perseguidos. Netanyahu también sostuvo que “muchos líderes que condenan públicamente a Israel, en privado nos agradecen”.
Uno de los puntos centrales de su intervención fue el rechazo absoluto a la creación de un Estado palestino. A juicio del mandatario, implicaría un “suicidio nacional” para Israel. Además, calificó a la Autoridad Palestina como “corrupta hasta la médula”, en respuesta al reciente reconocimiento de Palestina por parte de Reino Unido, Canadá y Australia.
Netanyahu defendió la ofensiva israelí en la Franja de Gaza, asegurando que su país ha “destruido la mayor parte de la máquina terrorista” de Hamás y que el objetivo es “terminar el trabajo lo más rápido posible”. Según el Ministerio de Sanidad gazatí, los ataques han dejado más de 65.000 muertos y más de 167.000 heridos en la población palestina.
El jefe de gobierno israelí también celebró lo que describió como logros estratégicos en el último año, entre ellos ataques contra el programa nuclear de Irán y la muerte del líder de Hezbolá, Hasán Nasralá, en el Líbano. El discurso, que se extendió por 45 minutos, concluyó con los aplausos de un reducido grupo de delegaciones aliadas, antes de dar paso a la intervención del primer ministro de Pakistán, Shehbaz Sharif.