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Sigue floreciendo la anti-democracia

Juan Carrasco
Por : Juan Carrasco Alcalde de Quilicura
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La esencia de toda democracia es la competencia de ideas y de proyectos, ya sean comunales, regionales o nacionales. Sin competencia, las ideas se van muriendo, las personas se acomodan en sus puestos de poder, alejándose de la ciudadanía.


Es impresentable que a 20 años de retomada la democracia, el alcalde de la comuna de La Florida sea designado a dedo entre cuatro paredes. Estas negociaciones demuestran que los partidos políticos siguen acumulando y actuando como dueños de un poder que la ciudadanía soberana no les ha entregado.

La falta de democracia interna y externa que los partidos muestran (tanto en la Alianza como en la Concertación) se debe básicamente a que realmente no les importa lo que las personas piensen o quieran decir, sino que su interés es la búsqueda o la mantención del poder por el poder.

La esencia de toda democracia es la competencia de ideas y de proyectos, ya sean comunales, regionales o nacionales. Sin competencia, las ideas se van muriendo, las personas se acomodan en sus puestos de poder, alejándose de la ciudadanía.

[cita]La esencia de toda democracia es la competencia de ideas y de proyectos, ya sean comunales, regionales o nacionales. Sin competencia, las ideas se van muriendo, las personas se acomodan en sus puestos de poder, alejándose de la ciudadanía.[/cita]

Por ejemplo, en Quilicura, gracias a un gran grupo humano convencido en un proyecto político distinto, logramos ser electos siendo 100% independientes, atreviéndonos a desafiar a la alcaldesa que llevaba más de 12 años de ejercicio en el cargo. En nuestra campaña no contábamos con los recursos monetarios para hacer frente a la maquinaria que existía en el municipio, pero gracias a nuestras convicciones, sueños colectivos y un trabajo cercano, logramos recorrer toda la comuna, conversar con los vecinos, entender y representar sus demandas.

Porque pudimos competir democráticamente, es que logramos que ideas frescas y una nueva forma de gestión ciudadana se instalara en Quilicura. Todos los que hoy trabajamos en el municipio, estamos convencidos que lo más importante es dar espacios de participación para escuchar a los vecinos, compartir sus sueños y problemas, para actuar siempre pensando en sus necesidades.

Me surgen dos preguntas: ¿Cómo quieren los partidos políticos que los ciudadanos no se alejen de las instituciones, si ellos mismos niegan espacios de participación? y,  ¿No será el principal camino de acercar la política a la sociedad el abrirse a la ciudadanía y estar cerca de ellos?

Parece que para la clase política dominante la participación ciudadana no se relaciona con la urgente necesidad de relegitimar la política. No son capaces de entender y asumir que las personas demandan una forma distinta de actuar en política: cercana, acogedora y participativa. Pareciera que prefieren omitir las señales de malestar ciudadano que día a día se manifiestan debido al mal manejo y toma de decisiones entre cuatro paredes (como los nuevos senadores designados o el nombramiento del alcalde de La Florida), con una cultura oscurantista y que poca garantía de transparencia le dan a la opinión pública.

Es impresentable, que el alcalde de una comuna (la autoridad política más cercana a las personas) no sea elegido a través de una nueva elección. Hago un llamado al presidente Piñera, y a todos los partidos políticos oficialistas y de oposición a que se atrevan a confiar en las personas y promuevan una gran reforma política, donde la democracia y el valor de la participación sean el eje en base a lo que construyamos la política de los próximos años.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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