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Por qué Codelco debe participar en la industria del litio

Gonzalo Gutiérrez
Por : Gonzalo Gutiérrez Doctor en Física. Miembro del Comité Corfo de Minería No Metálica. Ex -Presidente Comisión Chilena de Energía Nuclear
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Codelco, la minera de todos los chilenos, es la mayor empresa de cobre del mundo. Explora, extrae, funde y refina cobre y sus minerales asociados. El negocio principal consiste en vender cobre fino. Su producto estrella, los cátodos —con pureza del 99,99 %— son utilizados para producir tubos, cañerías, alambrones y alambres finos en trefilerías de Francia, Alemania, China. Son esos los cables que luego se usan en las líneas de transmisión, edificios, aviones, automóviles así como en los conectores de los artefactos electrónicos en todas partes del mundo.

El buen precio del cual goza hoy nuestro cobre se debe fundamentalmente a la gran demanda del metal rojo por parte de la India y China. Se prevé que el crecimiento durante la década del 2008-2018 será del 3,2 %, superior al de las tres últimas décadas. Sin embargo, una mirada más detallada permite ver que la tasa de demanda de India caerá en 1 % entre el 2015-2020, mientras que la de China lo hará en un 3 %. Esta baja se debe a que la demanda actual de esos países está asociada principalmente al desarrollo de su infraestructura, lo cual tiene un límite natural.

[cita]En un escenario de adopción rápida de vehículos eléctricos se estima que el liderazgo en su producción estará en Japón, China y EE.UU. Ciertamente el acceso al recurso litio de modo continuo, seguro y permanente se convierte en un factor clave para confirmar ese liderazgo. China posee los recursos para asegurar su autoabastecimiento. Sin embargo, Japón y EE.UU. necesitan adquirir litio en el extranjero. Y allí entra Chile: tenemos las mayores reservas, al menor precio, así como experiencia en su explotación y distribución. Codelco tiene pertenencias mineras en el salar de Pedernales y Maricunga que son ricos en litio. Corfo posee pertenencias mineras en el mejor lugar de todos, el salar de Atacama.[/cita]

Una vez cumplida esta etapa, sólo queda la mantención. En los países desarrollados la demanda está asociada básicamente a la construcción residencial, industrial y de oficinas, que no representa un volumen mayor. Por lo tanto, si queremos mantener en el futuro el ritmo actual de ventas, urge buscar nuevos mercados y oportunidades donde poner el cobre una vez que la demanda de India y China disminuyan. Pero, ¿y qué tiene que ver esto con el litio? Aunque no lo parezca a primera vista, su relación es directa.

El cobre se usa básicamente en dos aspectos: como material estructural, en cañerías y aleaciones, y como material funcional, donde se explota su propiedad de excelente conductor eléctrico y térmico. En ciencia de materiales siempre está presente el peligro de que se encuentre un sustituto para un material, como ocurrió con el caso del salitre. Afortunadamente en el aspecto funcional las amenazas de encontrar un material sustituto son menores, y por otro lado, es donde hay mayor proyección de demanda.

Esta viene tanto de la microelectrónica como de las aplicaciones médicas, aunque principalmente del gran crecimiento que tendrá la producción de vehículos eléctricos en el futuro. Lo que veremos serán autos híbridos -o sea, funcionando indistintamente con bencina o electricidad- como ya existen en el mercado chileno, o vehículos puramente eléctricos, que también ya han salido al mercado. Son varios los factores que intervienen para que en los próximos años aumente considerablemente el parque automotriz eléctrico en desmedro de los vehículos convencionales de combustión interna. Por un lado está la cada vez mayor escasez de petróleo con el consiguiente aumento de su precio, y por otro, la creciente necesidad de reducir las emisiones de gases contaminantes, en particular el CO2, que es la principal emisión de los vehículos convencionales.

Para el año 2020 se proyecta una producción estimada de 4,5 millones de autos híbridos. Lo interesante para la industria del cobre, y para Codelco en particular, es que cada uno de estos vehículos contiene aproximadamente 33 kg de cobre adicionales con respeto a un auto convencional. Más aún, un automóvil totalmente eléctrico tiene unos 60 kg adicionales. Un ejercicio elemental permite constatar que si los 70 millones de vehículos por año que se producen actualmente fueran reemplazados en su totalidad por vehículos de tecnología eléctrica, digamos híbrida, significarían una demanda de 2,3 millones de toneladas de cobre fino por año adicionales. O sea, el aumento de vehículos eléctricos abre nuevos mercados con oportunidades insospechadas para el cobre fino de Codelco.

Sin embargo, para que se produzca una conversión masiva de vehículos convencionales a la tecnología eléctrica se requiere que los usuarios estén convencidos del cambio, asegurándoles que los vehículos eléctricos tendrán un desempeño comparable a los convencionales y un precio razonable. El alto desempeño de los vehículos eléctricos esta íntimamente relacionado con los sistemas de almacenamiento de energía, donde las baterías de litio resultan ser fundamentales.

El litio tiene el mayor potencial electroquímico de todos los elementos y es el más liviano de ellos, a excepción del hidrógeno y el helio, lo cual le otorga una eficiencia máxima para su uso en baterías eléctricas, tales como la de ion-litio. Es un hecho que las grandes compañías de automóviles se embarcarán en el negocio en la medida que tenga un suministro seguro y permanente de litio para fabricar las baterías de sus vehículos.

En un escenario de adopción rápida de vehículos eléctricos se estima que el liderazgo en su producción estará en Japón, China y EE.UU. Ciertamente el acceso al recurso litio de modo continuo, seguro y permanente se convierte en un factor clave para confirmar ese liderazgo. China posee los recursos para asegurar su autoabastecimiento. Sin embargo, Japón y EE.UU. necesitan adquirir litio en el extranjero. Y allí entra Chile: tenemos las mayores reservas, al menor precio, así como experiencia en su explotación y distribución.

Codelco tiene pertenencias mineras en el salar de Pedernales y Maricunga que son ricos en litio. Corfo posee pertenencias mineras en el mejor lugar de todos, el salar de Atacama. Tenemos una oportunidad única de incentivar la conversión de autos convencionales a eléctricos por medio de ser proveedores seguros y de largo plazo de litio para aquellas compañías de Japón o EE.UU. que así lo requieren. De esta forma aseguramos también una demanda importante de cobre fino en el futuro.

Codelco tiene la experiencia, el know how y los recursos humanos para llevar a cabo un emprendimiento como este, entrando a la explotación de litio. Sus propios ingenieros así lo han expresado: “En Codelco tenemos profesionales y supervisores capaces de emprender ese desafío en forma exitosa, lo hemos demostrado no sólo en el rescate de la mina San José, sino en las últimas cuatro décadas, cuando sus ingenieros se hicieron cargo de las minas que administraban expertos mineros estadounidenses… Debemos aclarar que en términos metalúrgicos el cobre es un mineral muchísimo más difícil de producir que el litio.

Es más, nuestros ingenieros metalúrgicos operan plantas pilotos de producción de uranio, más complejo aún y hace unas semanas se inició una experiencia industrial de biolixiviación, producción de cobre de baja ley con utilización de bacterias…” declaró el ingeniero Pablo Fernández, dirigente de la Federación de Profesionales de Codelco (FESUC) en una reciente entrevista. Así, la estatal puede diversificarse dentro del mismo giro minero y asegurar de este modo su producto principal, el cobre, produciendo litio.

Esto, que suena paradojal, no significa perder el foco como lo han insinuado algunos, sino que por el contrario, significa tener creatividad, inteligencia y voluntad para aprovechar las oportunidades. No es necesaria ninguna modificación legal ni tampoco son necesarios ningún tipo de contratos especiales de operación para que Codelco entre a la industria del litio. La propia ley actual manda que este mineral sea explotado por el Estado o una empresa del Estado.

Ya es hora de cumplir con ello y Codelco está en condiciones óptimas para realizarlo: es el mayor productor de cobre del mundo y por informaciones recientes sabemos que será también en unos años más el mayor productor de molibdeno del mundo. De seguro esta empresa del Estado puede convertirse también en la mayor productora de litio del mundo, asegurando nuestro liderazgo. Sería un nuevo orgullo para todos los chilenos y un inmenso beneficio para todo el país.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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