Literatura, artes visuales y otras disciplinas también trabajan en nuestros talleres, motivados por la esencia de la memoria y la creación artística. Dentro de ellos, cabe destacar el Taller de Documental “40 años en 400 segundos”, en donde los jóvenes reciben herramientas para hacer investigación periodística y elaborar reportajes audiovisuales, de esta manera, son capaces de producir contenidos atractivos y movilizadores para su generación.
A 40 años de ocurrido el Golpe Militar en Chile, desde Balmaceda Arte Joven nos hemos propuesto plantear la reflexión desde la creación, desde la mirada de futuro. Nuestro trabajo es con y para los jóvenes de Chile, nacidos todos ellos en democracia, pero no por eso exentos de historia, de memoria y de revisión de los hechos que forman parte estructural de nuestra construcción de país.
Desde nuestra institución, por más de 20 años procuramos, a través de la formación artística, tomar los temas que preocupan al país y generar con ellos procesos de memoria creativa, mostrar talento y explorar nuevas posibilidades de arte. Tenemos la convicción de que mirar al pasado y revisar la historia, para proponer una mirada desde el arte en pos de la construcción de futuro, es una forma de colaborar en la formación y desarrollo de nuevas capacidades y talentos en nuestros jóvenes.
Es así que para conmemorar los 40 años del golpe, el tema de la memoria atraviesa todas nuestras disciplinas; Desde el diálogo, con la participación de destacados creadores y académicos en los ciclos “CH-73/40: 11 Conversaciones a 40 años del 11”, once mesas con la finalidad de generar una reflexión en torno a los cambios que se han producido en el arte y la cultura en nuestro país en estos 40 años.
[cita]Literatura, artes visuales y otras disciplinas también trabajan en nuestros talleres, motivados por la esencia de la memoria y la creación artística. Dentro de ellos, cabe destacar el Taller de Documental “40 años en 400 segundos”, en donde los jóvenes reciben herramientas para hacer investigación periodística y elaborar reportajes audiovisuales, de esta manera, son capaces de producir contenidos atractivos y movilizadores para su generación.[/cita]
Desde la música, en conjunto con el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos y el Museo de la Solidaridad Salvador Allende, estamos realizando un homenaje a las víctimas de la dictadura descritas en el Informe Rettig, que no han sido tributadas públicamente. Además de descubrir nuevos talentos musicales en el país, con esta iniciativa tenemos la oportunidad imperdible de revisar las historias personales e íntimas de chilenos y chilenas que forman parte del tejido histórico de la construcción de memoria. Es por ello que a este homenaje, a modo de concurso, le hemos llamado “Mala Memoria, Música para no olvidar”.
El teatro y la danza también participan de esta memoria, trabajamos con las compañías estables de Balmaceda en dos importantes montajes, uno es la obra dirigida por Carlos Huaico, “Fragmentos de la Memoria”, que es el resultado de una investigación que los integrantes realizaron para rememorar la historia, y la otra es la pieza “La Ciudad: 40 años después”, a cargo de la coreógrafa Carolina Bigorra, donde se expondrá el trabajo de un intenso proceso creativo realizado por los jóvenes talentos del elenco.
Literatura, artes visuales y otras disciplinas también trabajan en nuestros talleres, motivados por la esencia de la memoria y la creación artística. Dentro de ellos, cabe destacar el Taller de Documental “40 años en 400 segundos”, en donde los jóvenes reciben herramientas para hacer investigación periodística y elaborar reportajes audiovisuales, de esta manera, son capaces de producir contenidos atractivos y movilizadores para su generación.
Nuestra intención es generar una reflexión que cale profundo y que a través de sus creaciones la sociedad sepa de este enorme y fructífero trabajo. Sí señores, los jóvenes en Chile reconstruyen la memoria del país en el que viven, buscan entender y desafiar la historia. Por eso, hoy queremos vociferar que se está produciendo un proceso de creación artística y formación cultural rico en revisión de pasado y con ansias de crecimiento a futuro. Son jóvenes que miran hacia atrás y hacia adelante, con dignidad y opinión. De todo esto y más, nos sentimos orgullosos.