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Responsabilidad política y ética frente a la vulneración de la infancia

Por: Fundación Infancia, Movimiento Nacional por la Infancia y Programa Abrázame


Señor Director:

Como Fundación Infancia, Movimiento Nacional por la Infancia y Programa Abrázame, y frente al rechazo de la Cámara de acusar constitucionalmente a la ministra Javiera Blanco por el caso Sename, creemos que la vulneración sostenida de los derechos de los niños, niñas y jóvenes de nuestro país no puede continuar y no puede haber impunidad política frente a esta grave situación.

El Estado ha perpetuado la vulneración durante muchos años y hoy los niños, niñas y jóvenes no cuentan con los medios de protección suficientes que debieran estar resguardados por el Ministerio de Justicia y vigilados atentamente por el Instituto de Derechos Humanos.

Adherimos a lo señalado por los diputados Jackson y Boric en relación a que lo que sucede en torno al Sename ya no sólo ataña a lo formal, técnico y de gestión, sino que abarca temas políticos y éticos. Como bien dicen, la niñez no es subordinable ni excluible y debemos velar porque los niños, niñas y jóvenes no sólo sean sujetos de protección, sino que comencemos a reconocerlos como sujetos de derecho.

En ese sentido, y lo que vemos como más grave, es que este 6 septiembre no hubo una votación personal de cada miembro, sino que fue una decisión de un conglomerado político. Ver votos de parlamentarios que lloraron en las comisiones, de personas que han marchado en nombre de los niños, que se han reunido con las fundaciones que trabajan por ellos, demuestran la hipocresía política existente y la falta de representatividad que debieran tener conforme a nuestra Constitución Política. Esta votación no representa en nada a los civiles, si no por el contrario.
Y la verdad es que acá no se trata sólo de una acusación constitucional, de un show mediático, se trata de hacerse cargo de la existencia de la vulneración a los derechos esenciales, ya sea formen parte de la Constitución o los Tratados Internacionales debidamente ratificados. Acá lo que vemos es la falta de protección de estos derechos por parte de los órganos del Estado, en conformidad al artículo 5 de la Constitución Política de la República. Grave, sí, gravísimo porque hasta hoy todos se han lavado las manos en defensa de los niños.
Detrás de esta problemática hay miles de niños que están ocultos por la negligencia y la falta de conciencia de un conglomerado político. Miles.

Esto no es una derrota, es el despertar de una sociedad civil que no es representada por los poderes del Estado y que perseguirá hasta el cansancio que aquellos que hoy manejan al país con impunidad, sientan en el peso de sus consciencias las muertes de todos aquellos pequeños indefensos que creyeron en un futuro mejor de la mano de estos políticos que hoy les dan la espalda.

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