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Día mundial contra la trata de personas

Por: Aída Leiva


Señor Director:

El llamado que hizo la ONU al establecer el Día Mundial Contra la Trata de Personas hace ya nueve años, buscó sensibilizar y convocar a los Estados a cumplir con los compromisos adquiridos, consigna que HOY debiera estar más presente que nunca en nuestro país.

Ello porque la realidad migratoria que hemos enfrentado en Chile, ha evidenciado el ingreso de extranjeros por pasos no habilitados y ha puesto en la palestra sus consecuencias inmediatas, en desmedro de otras subyacentes, donde se gesta el terreno perfecto para que adultos se aprovechen y lucren de otros seres humanos. Ellos aprovechan todas sus vulnerabilidades, que ciertamente aparecen acentuadas en situaciones de desplazamiento forzado.

Es un hecho que el drama que viven las víctimas de trata, responde a la insensibilidad de adultos involucrados en el delito, que no se cuestionan la idea de comprar y vender a otros seres humanos. Por ello, los especialistas han advertido que “donde hay grandes corrientes migratorias, hay que poner los mayores esfuerzos por luchar contra la trata de personas”.

Esto nos convoca a redoblar esfuerzos para combatir este tipo de delitos, especialmente cuando los más afectados siguen siendo niños y mujeres. Los primeros, con fines de trabajos forzosos en situaciones precarias, y, las segundas (incluidas niñas), explotadas sexualmente. Las cifras muestran que para 2020 el 7% de las víctimas correspondieron a niños, niñas y adolescentes, pero sabemos que el país de hoy no es el mismo. Los cambios en el fenómeno migratorio, marcado por el desplazamiento de familias y niños (incluso solos), debiera ser una alerta para el diseño de una nueva política migratoria que prevenga la consecución de uno de los más graves delitos de violación a los derechos humanos.

Aída Leiva,

Coordinadora de Proyectos Corporación Opción.

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