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Aclaración por notas relativas al proceso disciplinario de Rodrigo Polanco en la UC

Por: Joaquín Silva, Decano Facultad de Teología UC


Señor Director:

Me dirijo a usted en relación a tres artículos publicados en su medio, el 28 de febrero, 5 de marzo y 11 de marzo de 2019, referidos a un proceso disciplinario tramitado en nuestra universidad. Estos artículos contienen una serie de imprecisiones e interpretaciones alejadas de la realidad, que me parece oportuno aclarar:

1. El titular del día 11 de marzo desinforma gravemente al indicar que el profesor es acusado de “abuso” sexual. La acusación no es por abuso, sino por supuesto acoso sexual.

2. Es falso que yo como decano de la facultad haya culpado a la denunciante de que el sumario no fuese abierto nuevamente, afirmación que se hace sin prueba alguna.

3. El profesor Rodrigo Polanco hace uso de un derecho que tienen todos los profesores titulares de la UC a un período sabático, el cual se concede y se aconseja cada 6 años (y no cada 10 como dice la nota) según reglamento. Este permiso y oportunidad son otorgados para que los docentes puedan realizar investigaciones de su interés; por lo que el Prof. Polanco no estará alejado de la facultad, sino que dejará las actividades estrictamente docentes para realizar su trabajo investigativo.

4.- En el artículo del 5 de marzo se indica que “fuentes de la facultad” entregaron información respecto al tema, lo cual no corresponde a los hechos, puesto que ningún periodista de ese medio tomó contacto con las personas de la facultad que pudieran entregar información adecuada sobre este tema.

5.- Respecto de la nota publicada el 28 de febrero del presente año, en la que se afirma que la investigación interna que realizó la Secretaria General buscó cuestionar la moralidad de la alumna que denunció al profesor al agregar fotos de su hijo en el expediente, se aclara que se adjuntaron como forma de probar la información entregada por testigos en la indagación, y no como supuesto cuestionamiento de la denunciante. La investigación fue imparcial y estrictamente conforme a la reglamentación vigente en la constitución y en la UC, como ha sido por lo demás manifestado en la apelación en curso.

6.- En la misma noticia, se indica que el profesor Polanco, por el cargo de director de Licenciatura, se convirtió en un “jerarca administrativo y político” con influencias como la asignación de horas a los profesores de la facultad y acceso privilegiado al rector. Además de ser infundadas esas suposiciones, sin respaldo en los hechos, se debe aclarar que la asignación de horas es una labor que le corresponde al vicedecano y al Consejo de la facultad; la titulación de los estudiantes depende de estrictos criterios académicos, basados en la reglamentación vigente; y la designación de la comisión del examen de título de los estudiantes es una labor que corresponde a la secretaria académica, según la disponibilidad de los académicos.

7.- Se aclara que la Universidad otorga distinciones, como la Excelencia Docente, tomando en cuenta criterios profesionales y académicos y no por razones antojadizas como se sugiere en dicho artículo. Y esa designación depende de una comisión compuesta por varios miembros de la comunidad universitaria.
Nos parece importante que se pueda esclarecer esta información, primero, por el derecho que tenemos todos a la libertad de expresión y, segundo, porque estos diálogos enriquecen el ejercicio del periodismo en el cual se entregan las distintas aristas de una situación con el objetivo de entregar la información necesaria para crear opinión.

Joaquín Silva
Decano Facultad de Teología UC

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