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Violencia laboral, una deuda pendiente

Por: María Jesús García-Huidobro


Señor Director: 

La lucha por los derechos igualitarios de las personas se ha vuelto prioridad en el mundo y en nuestro país si bien han habido avances, aún faltan espacios por conquistar y uno de ellos es el trabajo y la concientización de la violencia que se puede generar en él. Sabemos que este ítem es esencial para la vida de las personas y ocupa gran parte del tiempo, sin embargo muchas veces las experiencias vividas por los colaboradores no son las mejores. De hecho, sólo el año pasado la Dirección del Trabajo recibió 3.200 denuncias por vulneración de derechos.

Y por otro lado, a pesar de la grave situación, nos dimos cuenta a través de una encuesta realizada por Laborum.com, que el 43% de los encuestados no sabe la diferencia de los distintos tipos de violencia que se pueden ejercer en dichos espacios y un 41% afirmó que en su empresa no existen instancias para generar conciencia al respecto.

Es importante comenzar a poner atención al problema. La pandemia incrementó el estrés y los índices de violencia en espacios privados y aunque en algunos rubros el teletrabajo se volvió una opción, lo presencial no es inherente de la violencia ya que esta se puede ejercer de manera simbólica, económica, sexual, física, psicológica y otras formas, traspasando incluso la virtualidad. El 2019 la Organización Internacional del Trabajo lanzó el Convenio 190 sobre la eliminación de la violación y acoso en el mundo laboral, pero según datos de Laborum, un 65% de los encuestados jamás habían escuchado de él. Asegurar espacios laborales libres de violencia es un trabajo de todos, pero las organizaciones deben tomar cartas en el asunto y crear protocolos efectivos que contemplen capacitaciones, sanciones, estrategias de prevención y acompañamiento a víctimas. Según nuestra medición, apenas el 13% de los encuestados consideraba las medias adoptadas por su empresa como efectivas. Sólo tomando consciencia del problema y generando protocolos efectivos en los espacios de trabajo podremos comenzar a revertir estas cifras.

Por María Jesús García-Huidobro, gerente de marketing de Laborum.com

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