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Las similitudes de la ciencia ficción en un mundo en suspenso Opinión

Las similitudes de la ciencia ficción en un mundo en suspenso

No estamos viviendo en ninguna serie como Black Mirror o Years and Years, pero sí, ese mundo de ciencia ficción se asemeja en demasía al mundo contemporáneo. El desarrollo del COVID-19 ha dejado de manifiesto en cómo el mundo está en suspenso pero es un suspenso que busca soluciones.


Para abrir la imaginación del mundo en que vivimos, sin lugar a dudas recurrimos constantemente a la ciencia ficción como un género que nos permite crear nuevos mundos, controlarlo o adelantarnos a los hechos. Por eso no es extraño que tanto en populares series o películas como Years and Years o Black Mirror e incluso Star Wars y tantas otras, el mundo futurista y lejano que se presenta, parece cada vez más real en la medida que avanzan los años y avanza la red de tecnologías. Pero detrás de eso no se esconde nada conspirativo de alguna empresa trasnacional sino un contexto dado. Y es que lo que vemos en las pantallas, son problemas sociales y políticos contemporáneos como también otros más complejos, tales como el cambio climático o una pandemia.

Así la ciencia ficción crea múltiples soportes de resultados que son las representaciones del mundo contemporáneo o de nuestro tiempo, pero también debemos tener en cuenta los factores históricos ya sean políticos, sociales y culturales que atravesamos. Entendiendo lo anterior no solo como ciencia ficción, el COVID-19 se transforma entonces en la parábola del mundo que atravesamos: un capitalismo-neoliberal en una crisis que no sabemos aún cuáles serán sus repercusiones; la evidencia acelerada del cambio climático; la crisis de la democracia representativa; la manera en como se ha construido la globalización; en fin, el COVID-19 nos invita a buscar soluciones no solo a la pandemia por supuesto, sino al entramado de complejidades que nuestra civilización atraviesa.

El mundo está en suspenso, ¿y luego qué?

El mundo está en suspenso

El desarrollo del COVID-19 ha dejado a todo el mundo en un suspenso nunca antes visto.

El mercado global y su entramado de interdependencias ha hecho caer a todas las capitales mundiales y con una ya anunciada recesión global. Todas las actividades están paralizadas o se están desarrollando por redes sociales virtuales; las materias primas ya no se extraen como hace algunos meses; o la gente convirtió su casa en una oficina. Toda la gente está expectante respecto a qué se viene para ellos, sus familias, amigos, el país y la humanidad. Hay una justificada incertidumbre del futuro. Al parecer el entramado de interdependencias que habíamos construido en esta <> fue bastante frágil y no protegió a la gente.

Y es que nadie tiene el sartén del futuro en sus manos, como tampoco vamos a decir que el sistema capitalista-neoliberal se acabará durante la pandemia; pero si nos pone en ejercicio y ya no solo a trotar sino a correr, en la necesidad de dejar de estar en suspenso y expectante al mundo que está por venir, o nos gustaría crear. Debemos ponerle ruedo al mundo que queremos, al mundo que se diferencia de este.

La ciencia ficción nos ha enseñado que no solo es la representación de nuestro mundo sino también al mundo que aspiramos, que buscamos superar. No podemos solo seguir describiendo la realidad y asumiendo sus límites, debemos ir más allá: pasar del suspenso al mundo en que queremos vivir. Seamos el capítulo de esperanza de este capítulo de ciencia ficción.

El mundo que está por venir

Cada continente y país enfrentará el porvenir de distinta manera dentro del entramado de interdependencias, hay unos que mandan y otros que no. Pero si ha dejado de manifiesto las debilidades y preocupaciones de esta forma de organizarnos y que sí podemos vivir de distinta manera y en otros tiempos. Misma tecnología pero al servicio de las mayorías sociales; un Estado que sea entendido como Estado de Derecho Social y no que privilegia al mercado. El mundo que está por venir comienza a tomar forma ahora y podemos adelantarnos para tomar las medidas necesarias.

Hasta dónde se puede resquebrajar el mundo que construimos, está por verse. Pero eso no sucederá de la noche a la mañana o por la sola voluntad, sino que será un entramado de interdependencias que conspiren hacia ello. Como la mejor serie o película de ciencia ficción, hay un momento en que los personajes principales toman el sartén de la trama sobre sus manos: este es el momento en que la ciudadanía organizada proyecte y concrete el mundo que está porvenir.

Y me tomaré de una frase que señalara la congresista de Nueva York, Alexandria Ocasio-Cortez: “Empodérate. Toma espacio. Hazte escuchar. Mantén la puerta abierta y lleva a otros contigo”. Hagamos que esta serie tengan un buen final.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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