Publicidad

Senado de EEUU cuestiona al Riggs Bank por cuenta secreta de Pinochet

Informe parlamentario estima que riqueza del ex mandatario fluctuaba entre US$4 millones y US$8 millones, repartidos en cuentas personales y corporativas. Según el informe del Senado, el Riggs tuvo a Pinochet como cliente, sabiendo de quién se trataba, pero no ejerció su obligación de exigir los formularios de información llamados «Know Your Customer» (Conozca a su cliente), requeridos por los estatutos sobre lavado de dinero.


Un subcomité de investigaciones especiales del senado norteamericano, apoyado por un exhaustivo informe realizado por la contraloría de ese país, reveló esta mañana que Augusto Pinochet posee una gran fortuna personal, parte de la cual está en cuentas secretas en el extranjero, una noticia que destapó hoy el diario Washington Post.



Específicamente, la investigación senatorial se refiere a cuentas asociadas con el Riggs Bank de Washington, que oscilan entre los 4,5 y los 8 millones de dólares. Según el informe, el banco proporcionó asistencia experta a Pinochet para formar compañías fraudulentas fuera del territorio norteamericano, con el propósito de resguardar los bienes en caso de que fueran confiscados o congelados por medios judiciales, debido a su detención en Londres.



En la audiencia, que se inició a las 9 de la mañana de hoy, y que continúa en estos momentos, han sido cuestionados los ejecutivos máximos del prestigioso y exclusivo Riggs Bank. En el exhaustivo interrogatorio público, al que han sido sometido estos ejecutivos, ni ellos ni los senadores del comité han puesto en duda en ningún momento la existencia de las cuentas de Augusto Pinochet en esa entidad.



El representante máximo de los demócratas en el comité, el senador Carl Levin, se refirió al affaire Riggs-Pinochet, documentado meticulosamente en un informe de 100 páginas, como «un tema bastante sórdido».



El banco Riggs tuvo a Pinochet como cliente, sabiendo de quién se trataba, pero no ejerció su obligación de exigir los formularios de información llamados «Know Your Customer» (Conozca a su cliente), requeridos por los estatutos sobre lavado de dinero. Cuando se pidió la confiscación y el congelamiento de las cuentas de Pinochet, el banco puso sus recursos a disposición del dictador para establecer compañías brujas (denominadas «Althorpe» y «Ashburton») fuera de los EEUU.



Los ejecutivos reconocieron haber cambiado el nombre del propietario de las cuentas de Augusto Pinochet Ugarte, a «A. Ugarte», reconociendo que eso había sido «impropio».



El banco también reconoció en la audiencia de hoy que tampoco cumplió con las exigencias regulatorias que requieren que se establezca claramente el origen del dinero en sus depósitos, así como que cada una de las transacciones de cada cuenta, sea «honorable y legítima».



Entre las transacciones cuestionadas se encuentra la transferencia de 1,6 millones de dólares desde Londres a Washington, en el período en que Pinochet estuvo detenido. El informe además revela que el banco usó sus propias cuentas para efectuar transacciones que en realidad involucraban dineros de Pinochet; que ocultó la existencia de estas cuentas ante una investigación gubernamental, y que una vez que se estableció la existencia de las cuentas de Pinochet, puso todo tipo de resistencia para revelar información.



Una de las culpas reconocidas por Riggs Bank es que aceptó sin antecedentes confiables que los dineros de Pinochet procedían de su «salario» y «fortuna familiar», lo que no deja de ser interesante si se considera que el ex dictador y su familia niegan haberse enriquecido durante los años en que Pinochet usurpó el poder en Chile. Llama también la atención que todos los medios de prensa internacional, desde el London Financial Times al New York Times, pasando por Bloomberg y Forbes, le otorgan a esta información una credibilidad absoluta.

Publicidad

Tendencias