Ante la discusión en particular que se avecina, el titular de Hacienda comentó que «esto es una instancia donde vamos a dialogar en la coalición de Gobierno, con la UDI con RN, vamos a dialogar también con la oposición».
El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, reiteró la voluntad del Ejecutivo de encontrar un mecanismo que permita destrabar la discusión del reajuste del salario mínimo que se produce todos los años, pero insistió en que en la actual propuesta de reajuste, el Gobierno mantendrá la responsabilidad para no comprometer las posibilidades de empleo de los jóvenes y los menos capacitados.
Luego que la Cámara de Diputados aprobara este jueves en general el proyecto de reajuste del salario mínimo, y con ello habilitara nuevamente la discusión de la iniciativa, el secretario de Estado agradeció a los parlamentarios de la Coalición por el Cambio y a los independientes que respaldaron el trámite, reiterando las consecuencias que se habrían originado si esta iniciativa no fuera aprobada.
Tal como lo hizo tras la habilitación anoche en el Senado, Larraín argumentó que de no aprobarse el reajuste propuesto por el Ejecutivo, el salario mínimo se mantendría en 182 mil pesos y no se podrían reajustar las asignaciones familiares a un millón 400 mil beneficiarios y el subsidio único familiar a más de dos millones de beneficiarios.
Ante la discusión en particular que se avecina, el ministro de Hacienda comentó que «esto es una instancia donde vamos a dialogar en la coalición de Gobierno, con la UDI con RN, vamos a dialogar también con la oposición».
Agregó que «todos estamos de acuerdo o hay un consenso muy grande que este mecanismo de fijar año a año y venir a la Cámara no da para más, hay que pensar un mecanismo alternativo y es eso lo que hemos estado trabajando como Gobierno en el Ministerio de Hacienda en diseñar fórmulas más permanentes para que el proceso de fijación del salario mínimo no tenga estos matices y pongan en riesgo el reajuste a los trabajadores y en eso hay un acuerdo bastante amplio, espero que podamos llegar a puerto y que de estas conversaciones podamos tener un mecanismo más permanente para poder fijar el salario mínimo».
«Ese mecanismo permanente puede significar muchas cosas», dijo Larraín, y por eso pidió no cerrarse a la discusión y a las distintas opciones que se han planteado. «No nos cerramos, hay distintos tipos de posibilidades pero lo importante es que tengamos un mecanismo más expedito. Piensen ustedes que este proyecto ingreso el 20 de junio y estamos hoy día a 5 de julio y seguimos discutiendo el tema del salario mínimo», precisó.
Añadió que hay muchos países como Inglaterra que tienen una comisión de salario mínimo, por lo que hay precedente en otros países donde el tema del salario mínimo se ve en instancias más técnicas siempre va a ver una discusión política sobre el mecanismo o la fórmula que se aplique.
Respecto de la discusión que se retomará el martes en la Cámara de Diputados, Larraín dijo que «la disposición es a dialogar, a escuchar y a continuar, creemos que hemos hecho una propuesta seria, responsable, nosotros tenemos que mantener la responsabilidad y en ese sentido estamos dispuestos a escuchar y vamos a escuchar».
«Nosotros hemos planteado 193 mil pesos, qué es lo que va a pasar en la discusión, ojalá que encontremos una fórmula que nos destrabe este tema y podamos continuar. Todo esto no puede ser un mecanismo de tipo voluntarista, es decir, mire esto es lo que va a ocurrir y esto va a ser a todo evento el salario mínimo porque eso tiene que depender de las condiciones de la economía».
Destacó que el monto de reajuste del salario mínimo no es un problema de recursos fiscales, puesto que los recursos fiscales involucrados en el proyecto de ley, incluyendo los 193 mil pesos, es un costo adicional de 6 mil 400 millones de pesos anuales, cifra que no es despreciable pero desde el punto de vista de las finanzas no es una cifra demasiado significativa en el monto del presupuesto global.
«Por lo tanto, no es un problema que el Estado quiera o no poner más, que más nos gustaría que los que tienen menos ganen más, no 200 sino 250 mil o más, pero hay que actuar de forma responsable porque no queremos comprometer las posibilidades de encontrar empleo de esas personas. La responsabilidad la vamos a mantener, vamos a cuidar el empleo, es más simpático salir a proponer montos mayores pero el Gobierno tiene que actuar con responsabilidad porque al final los trabajadores más jóvenes, menos capacitados y las pymes las que sufren cuando tenemos aumentos más allá en el salario mínimo», expresó.
