Por 19 votos en contra y 13 a favor
Que los independientes Carlos Bianchi y Carlos Cantero anunciaran que votarían en contra, fue lo que hizo al Ejecutivo saber de antemano que sufriría un revés, ya que la balanza se inclinaría en favor de la postura de la oposición. «El Congreso debe (…) romper las asimetrías y desigualdades y entender que no es lo mismo suplementar por subsidios, que dignificar dando mayor solvencia a los sueldos de los trabajadores», dijo Cantero.
La Moneda tendrá que recurrir este miércoles al envío de un veto aditivo presidencial para reponer en el Parlamento el proyecto de salario mínimo luego que el Senado, por 19 votos contra 13, rechazara la iniciativa que considera un monto de 193 mil pesos (equivalente a un reajuste de 6,0%), monto que la semana pasada ya había sido rechazado por la Cámara de Diputados.
El gobierno debe además reponer la indicación presentada este martes en la Cámara alta que proponía un reajuste a las Asignaciones Familiares del primer tramo y el Subsidio Único Familiar.
Durante la sesión especial que dio lugar a un acalorado debate, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, había insistido en que la propuesta de reajuste era «un 60% mayor que el del gobierno anterior», por lo que «no puede ser calificado como exiguo».
Y si bien reconoció que «todos quisiéramos un aumento superior», insistió en que «tenemos que cuidar a los trabajadores».
Tras el rechazo, el presidente de la Comisión de Hacienda, José García Ruminot (RN), manifestó que «en Renovación Nacional y la UDI esperamos que el gobierno presente lo más pronto posible el veto aditivo que permita reponer tanto el guarismo de 193 mil pesos para reajustar el salario mínimo como también reajustar las Asignaciones Familiares y el Subsidio Único Familiar».
El parlamentario comentó que este veto, «es la forma que tenemos, de acuerdo a nuestro ordenamiento constitucional de poder otorgar este reajuste a los trabajadores que perciben el salario mínimo».
«Esperamos también que ese veto cuente con la mayoría de votos suficientes tanto en la Cámara como en el Senado, de no ser así, muy lamentablemente sería el primer año que nuestros trabajadores no reciban este reajuste, por eso yo confío en la seriedad y la responsabilidad para que el reajuste propuesto sea aprobado mediante este veto aditivo», agregó.
El Ejecutivo deberá presentar el veto al proyecto a través de la Cámara de Diputados, lo que debiera concretarse este miércoles.
La discusión en sala no estuvo exenta de polémica, principalmente por el impasse que protagonizaron el presidente de la Corporación, Camilo Escalona, y el timonel de la UDI, Juan Antonio Coloma. Fue este último quien, durante su intervención, enfrentó las pifias y gritos desde el sector de las tribunas señalando que las discusiones eran cara a cara y no por la espalda.
Y momentos más tarde, Escalona le dijo, no sin ironía, que no era culpa de la tribuna que la bancada de la derecha le diera la espalda, desatando aplausos del público, pero la indignación del dirigente gremialista, quien le recordó al presidente de la Corporación que se limitara a cumplir el reglamento, el mismo que su interlocutor dijo que estaba acatando a cabalidad.
Finalmente, uno de los trabajadores de la empresa WalMart comenzó a gritar consignas desde la tribuna, obligando a Escalona a suspender por 10 minutos la sesión, la que se retomó posteriormente, pero con las tribunas vacías luego del desalojo de las mismas.
El gobierno confiaba en que el Senado daría el visto bueno al proyecto tras la incorporación de la indicación relativa a las asignaciones familiares. Pero durante el curso de la discusión, el hecho que los senadores independientes Carlos Bianchi y Carlos Cantero anunciaran que votarían en contra, dejó claro que tras la votación las aspiraciones de La Moneda sufrirían un revés, ya que la balanza se inclinaría en favor de la postura de las bancadas de oposición.
Por la mañana Chadwick había indicado que prefierían «mil veces que esto sea aprobado en su trámite legislativo normal», pero que la opción del veto es porque la asministración de Sebastián Piñera teme la posibilidad de perder el pago del reajuste del mes de julio si esto se sigue dilatando.
Luego de la votación, el senador del PPD Guido Girardi manifestó que el salario mínimo que está ofreciendo la actual administración no satisface las condiciones mínimas de asegurar que las personas vivan con «dignidad».
“El Parlamento rechazó el salario por insuficiente, por precario, por no cumplir con las expectativas de dignidad y el gobierno insiste, pero aún tiene posibilidad de mejor, de ser responsable y no volver a presentar algo que se ha rechazo tres veces. Vuelvo a repetir que tal como lo he rechazado ya dos veces, volveré a rechazar cualquier propuesta de salario mínimo que no sea decente”, manifestó.
Por su parte, el senador Cantero dijo sobre el veto que enviará el Presidente Sebastián Piñera, que «hay que diferenciar dos sensibilidades: la del gobierno y la del Parlamento, donde el Congreso debe mostrar la sensibilidad que reclama la ciudadanía, dar cuenta, hacerse cargo del descrédito de la política, de las imputaciones y molestia ciudadana hacia el rol que juega el Parlamento en romper las asimetrías y desigualdades y entender que no es lo mismo suplementar por subsidios, que dignificar dando mayor solvencia a los sueldos de los trabajadores».
