En el primer número de la Revista Pyme, que aparecerá de manera bimensual, Michelle Bachelet, Evelyn Matthei, Marco Enríquez-Ominami, Franco Parisi y Marcel Claude coinciden en que se trata de un sector que hay que cuidar, porque es el que da más empleo. El matiz son las propuesta de cada uno de ellos para alcanzar ese objetivo.
En el primer número de la Revista Pyme, que debutó hace pocas semanas, cinco de los nueve candidatos presidenciales que se medirán en los comicios del próximo domingo 17 de noviembre formularon sus propuestas a favor de las pequeñas y medianas empresas (PYME), un sector que aseguran debe ser protegido, por cuanto es el que concentra el grueso de la oferta laboral del país.
Pero para lograr ese objetivo cada uno de ellos tiene sus propias propuestas. Es así como la abanderada de la Nueva Mayoría, Michelle Bachelet, reiteró la necesidad de aumentar el impuesto a las empresas y de eliminar el Fondo de Utilidad Tributaria (FUT).
Al respecto indicó que para llevar a cabo las transformaciones estructurales para que Chile se vuelva un país moderno, con la reforma educacional incluida, se requiere un alto costo financiero a través de una reforma tributaria “responsable” que garantice ingresos permanentes.
“No sólo nos enfocaremos en reducir la evasión de impuestos para aumentar la recaudación fiscal, sino que también elevaremos gradualmente los impuestos a las empresas de 20% a 25%, en un plazo de 4 años. Al mismo tiempo, vamos a reducir la tasa máxima de los impuestos personales, del 40% actual a un 35%, en el mismo período de tiempo”, dijo.
Y consultada sobre la situación en la que quedarán las PYME en ese escenario, dijo que éstas gozarán de un trato preferente. “Queremos abogar por la protección a la pequeña y mediana empresa a través de una serie de medidas que buscan incentivar la inversión, como la depreciación instantánea. Además, hemos planteado ampliar el sistema simplificado bajo el cual tributan las pymes establecido en el artículo 14 ter de la Ley de la Renta. Hoy, sólo pueden acceder a este sistema aquellas empresas individuales que pagan IVA y que tengan ventas anuales inferiores a 5.000 UTM. Nosotros ampliaremos este beneficio a todas las micro y pequeñas empresas con ventas anuales inferiores a los 14.500 UTM, es decir, $581 millones”.
Y respecto al FUT, dijo que se trata de “una fórmula que se aplicó en los años 80, justo después de la crisis económica que vivió el país y las autoridades de entonces creyeron que era una medida necesaria para el buen funcionamiento de las empresas. Y bueno, ya no estamos en los 80. Esto implica que vamos a eliminar el FUT y lo vamos a hacer de manera responsable y gradual, a partir del cuarto año de implementada la reforma. Los dueños de las empresas deberán tributar por la totalidad de las utilidades de sus empresas y no sólo sobre las utilidades que retiran”.
Evelyn Matthei, por su parte, planteó que el tema requiere cautela, y que de requerirse de una nueva reforma tributaria su eventual gobierno la llevará adelante “con absoluto cuidado de no dañar la inversión privada ni el capital de trabajo de las Pymes».
“Promoveremos el emprendimiento porque un emprendedor, antes que nada, es alguien que ama la libertad, libertad para pensar, libertad para crear, libertad para emprender. Yo le garantizo que durante mi gobierno va a tener libertad, voy a resguardar su libertad y voy a exigir a los demás que se la respeten”, dijo.
En ese sentido planteó que se requiere que las PYME tengan un financiamiento competitivo y que se fortalezca la institucionalidad pública del emprendimiento.
Entre otras medidas propone que se concluya “el trámite legislativo de los proyectos de ley sobre Firma electrónica, Reforma a la ley de quiebras, Reforma a la ley de propiedad intelectual, de datos personales, factura electrónica y reforma a las cooperativas, los que se pondrán en marcha en el menor tiempo posible. Queremos aprobar la reforma a la Ley de Quiebras en el primer semestre de 2014, implementarla en el más breve plazo y elaborar una campaña de comunicación de sus beneficios para el emprendimiento”.
En tanto, Marco Enríquez-Ominami volvió a recordar que, antes de entrar a la política y en su calidad de realizador audiovisual, fue parte de las PYME.
«Yo no vengo del sistema financiero, pero antes de entrar en política a los 33 años me dediqué duro y firme a crear riqueza, crear identidad, productos, aunque en la cultura no se habla así. Conozco la competencia y en serio. Conozco lo que es pedir un crédito bancario para pagar un finiquito. ¿Tú crees que Camilo Escalona conoce eso, que hizo una boleta? ¿O que Jovino Novoa hizo una factura o se preocupó del PPM? Yo le tengo un enorme respeto al emprendedor».
Respecto a las medidas que adoptaría planteó como primer punto “el acceso a los bancos, donde pienso en las tasas de interés y en la competencia de los intermediarios electrónicos como Transbank. Quiero más competencia, quiero más BancoEstado. Segundo, el trato con el deudor en todo el sistema de información financiero, el llamado Dicom, donde se le entrega un monopolio impresentable a la Cámara de Comercio”
Franco Parisi dijo que propone “cero impuesto de primera categoría para las Pymes en sus primeros cuatro años de vida», y reiteró que su propuesta apunta a terminar con el abuso de los poderosos.
Parisi valoró que en los últimos años se hayan creado 200 mil empresas. Pero advirtió: “Son personas que están sumamente endeudadas, ya que no hay un trato lógico en el pago de impuestos. Es mejor ser emprendedor que ser un empleado. Sobre las políticas pro emprendimiento, creemos que ha sido más punch individual que por políticas del Estado. Esto porque las herramientas que utiliza el Estado son a través de créditos de la banca y ellos sólo quieren hacer un negocio. No así el BancoEstado, que hay que recuperarlo. Tiene que ser más un capitalista de riesgo que un banco tradicional. Además, hay que bajar la tasa de interés. En Chile es exageradamente alta”.
Finalmente, Marcel Claude propuso un cambio de modelo económico completo, donde por cierto las PYME ocuparían un lugar importante.
“Nosotros tenemos un proyecto centrado en el desarrollo de Chile y no en las multinacionales. Hace un par de años manejo una cifra aterradora: el 96% de las exportaciones chilenas las hace el 1% de las empresas. Y son las grandes, no hay Pymes ahí. La pequeña y mediana empresa no tiene ningún apoyo del Estado. Eso es curioso, porque le da el 70% del empleo a los chilenos, ¿pero será el 10% del crédito bancario? Con suerte. Los bancos no trabajan con la Pyme. Al contrario, le cobra unos intereses brutales”.
Agregó que “el Estado tampoco las apoya en colocar sus productos a nivel internacional o en fortalecer sus capacidades. Lo otro que afecta es el mercado. Además de las exportaciones, ¿cuál es la facturación de las Pymes en el mercado interno? Con suerte el 15%. Todo lo demás lo hacen las megaempresas. ¿Quiénes financian a la Concertación? Luksic, Matte, Angelini, Paulmann. Mira a Paulmann, que les paga a 60 días, a 6 meses a los proveedores que son pequeños y medianos empresarios. Yo les digo a las personas: no voten por nosotros, pero tampoco por quienes los financian y los tienen ahogados”.
A su juicio, las pequeñas y medianas empresas son de gran importancia porque “Ahí está el 70% del empleo. Y si quiero mejorar el empleo, tengo que mejorar a la pequeña y mediana empresa. Hay que resolver el tema de la deuda tributaria. La ‘solución Johnson’ la estamos estudiando para las Pymes, para que haya un saneamiento completo de la deuda con el Estado a través del SII”.
