Dijo que Reforma Tributaria fue mal tramitada y tiene problema «de origen»
El ex ministro de Hacienda y ex candidato presidencial mantiene su estrategia de coquetear con los «viudos» de la Concertación y algunos sectores de la DC, apostando así a abrir el espacio político de Fuerza Pública, y no sin proyectar en el horizonte el escenario electoral de 2017.
El ex ministro de Hacienda, Andrés Velasco, reiteró sus críticas a la Reforma Tributaria impulsada por el gobierno de Michelle Bachelet, asegurando que «no sólo ha sido mal tramitada, sino que también ha tenido un origen que deja bastante que desear».
«No existen estudios que analicen esta reforma en particular, sus impactos sobre el ahorro, la inversión y el crecimiento», insistió el economista, en un nuevo episodio de su arremetida de los últimos días, que tiene la vista enfocada en el escenario electoral de 2017, con la apuesta de ampliar el espacio político de Fuerza Pública a los «viudos» de la Concertación y a parte de la Democracia Cristiana.
En esa línea, Velasco hizo una comparación entre la propuesta tributaria con la reforma de pensiones llevada a cabo en el primer gobierno de Bachelet, surgida sobre la base de la Comisión Marcel.
«Ese fue un proceso que se hizo en base a una decena de estudios y la discusión se desarrolló durante años, por lo que tuvo una génesis de harta reflexión, análisis y deliberación. En cambio, los cambios tributarios propuestos tienen un origen distinto, ya que ha sido mucho menos deliberativo», indicó el ex jefe de las arcas fiscales y asimismo ex precandidato presidencial.
Y agregó que «la forma en que la administración ha tramitado el proyecto ha dado poco espacio para la discusión y, por ende, para la propuesta de alternativas que perfeccionen la iniciativa. El proceso político no ha dado el ancho».
De acuerdo a Velasco existen dos factores que generan los problemas de origen de la reforma: «Ésta es fruto de un ambiente de frustración frente al sistema tributario, donde gobiernos anteriores trataron de corregir los abusos que realizan las compañías por fallas del sistema, pero no contaron con los votos necesarios (…) y está cómo se llegó a esta fórmula. La abolición del FUT, entre otros elementos, no fue una decisión del ministro (de Hacienda, Alberto) Arenas ni de la Presidenta. Más bien respondió a un acuerdo tomado entre los partidos de la Nueva Mayoría antes de que Bachelet volviera al país».
«Dicha decisión fue tomada sin mayor análisis y sin estudios de por medio», concluyó.
