Al igual que en la carrera parlamentaria, la tienda gremialista lidera por lejos la cantidad de donaciones secretas por parte de empresas –hoy bajo la lupa– hechas a sus candidatos al sillón presidencial. Situación que, al contrario de lo que aseguró su líder Ernesto Silva, no se revirtió en la última campaña entre Michelle Bachelet y Evelyn Matthei, en que esta última obtuvo más del doble de recursos bajo esta vía.
El remezón político que atraviesa la UDI en medio del caso Pentagate, que tiene en la mira de la Fiscalía al histórico financista de la tienda de calle Suecia Carlos Alberto “Choclo” Délano, ha puesto en jaque la credibilidad del financiamiento de campañas.
La discusión se ha centrado principalmente en los aportes reservados, que son contribuciones privadas superiores a 20 UF e inferiores al 10% del gasto electoral de cada candidato o partido político y que, tal como lo dice su nombre, son secretas.
Detrás de ellos se encuentran grandes empresas, que históricamente han favorecido a la tienda gremialista. Así lo constató El Mostrador en una investigación publicada recientemente, que devela que 45% del total de aportes reservados entregados entre 2005 y 2013 a candidaturas parlamentarias han llegado al partido liderado actualmente por Ernesto Silva.
El diputado, que ha debido enfrentar la difícil situación que vive su partido por el caso que lleva el fiscal Carlos Gajardo, también se ha referido a los aportes reservados, institución que respalda. En 2013 fue el diputado que mayores recursos obtuvo por esta vía ($ 268.249.000).
El sobrino político del “Choclo” Délano señalaba la semana pasada que este tipo de donaciones secretas se ha focalizado “con más fuerza en la centroderecha”, lo que “ha tenido una tendencia a mantenerse en las candidaturas parlamentarias”.
[cita]Sobre la base de estos cruces, en la última carrera presidencial la UDI obtuvo casi 5 mil millones de pesos en aportes reservados para su candidatura presidencial, que terminó siendo representada por Matthei –y que corresponde al 60% del total de los gastos declarados en su campaña– versus los 2,4 mil millones de pesos de la Nueva Mayoría, representada únicamente por la socialista Michelle Bachelet. O sea, más del doble.[/cita]
Sin embargo, Silva marcó una diferencia con las presidenciales. El viernes señalaba a La Segunda que “ahí se ha producido una equiparación de la cancha: en la última campaña Michelle Bachelet tuvo bastantes más aportes reservados que todos los otros candidatos”.
Pero las cifras dicen otra cosa. Según los datos del Servel, analizados por este medio, la campaña de la candidata UDI recaudó más del doble que la actual Mandataria por esta vía. De hecho, desglosando los aportes recibidos directamente por las candidatas, el partido o las primarias, Matthei siempre aventaja a Bachelet.
Además, al revisar los aportes reservados dirigidos a los partidos para presidenciales, al igual que con las parlamentarias, la UDI es la tienda que más recursos ha recaudado bajo esta fórmula, llegando a 40% del total.
Desde que empezó a regir la nueva ley de financiamiento –que entre otros puntos creó la figura de los aportes reservados tras el escándalo MOP-GATE– ha habido tres contiendas presidenciales.
Es así como entre 2005 y 2013, las campañas presidenciales han sumado $ 17.771.782.521 bajo esta fórmula, tomando en cuenta los aportes directos a los candidatos, la segunda vuelta y las donaciones a los partidos para sus presidenciables.
De este total, la Unión Demócrata Independiente (UDI) ha sido la más favorecida: 40% del total ha llegado a las arcas de las campañas de los dos candidatos que ha enarbolado el partido, Joaquín Lavín y Evelyn Matthei ($ 7.147.355.760), lo que representa casi 60% de los gastos totales declarados de ambas candidaturas.
En 2013, la ex ministra del Trabajo sumó más del doble en este tipo de recursos que Lavín ($ 4.985.884.764).
El Partido Socialista (PS) ha obtenido 25% de estos recursos en las dos campañas presidenciales en que ha postulado a la misma candidata, Michelle Bachelet. La actual mandataria y su tienda han recaudado $ 4.459.727.389 bajo este concepto, 26% del total de aportes obtenidos desde 2005.
En tanto, Renovación Nacional (RN), cuyo candidato fue dos veces Sebastián Piñera, se ha llevado el 20% de esta torta, alcanzando los $ 3.525.718.091, equivalente al 22% del total de aportes declarados en ambas campañas.
En último lugar está la Democracia Cristiana (DC), que obtuvo 11% del total de aportes reservados con su abanderado de 2009, Eduardo Frei Ruiz-Tagle, que alcanzó $ 1.912.451.890. Monto que representa 29% de sus gastos de campaña.
De esta forma, los candidatos de la Alianza se han llevado casi 11 mil millones de pesos, ($10.673.073.851), o sea, un 60% de los aportes reservados para dirimir quién liderará al país. En tanto, la Concertación (actual Nueva Mayoría) ha recaudado 36% de estos aportes: más de 6 mil millones de pesos ($ 6.372.179.279).
El restante 4% de los aportes se reparten entre candidaturas independientes ($ 393.777.862), el PRO ($ 324.000.000), el PRI (3.000.000) y el PC ($ 5.751.529).
Sobre la base de estos cruces, en la última carrera presidencial la UDI obtuvo casi 5 mil millones de pesos en aportes reservados para su candidatura presidencial, que terminó siendo representada por Matthei –y que corresponde al 60% del total de los gastos declarados en su campaña– versus los 2,4 mil millones de pesos de la Nueva Mayoría, representada únicamente por la socialista Michelle Bachelet. O sea, más del doble.
En la campaña presidencial de 2013, Michelle Bachelet recibió $ 1.781.111.214 en aportes reservados, considerando las platas que llegaron directamente a su candidatura, incluyendo la segunda vuelta.
A través de donaciones que se hicieron bajo secreto al Partido Socialista (PS), dirigidas directamente a la candidatura presidencial, se recaudaron otros $ 620.572.551 –que incluyen segunda vuelta–, que en la práctica son utilizados para la campaña del candidato. Es decir, Bachelet.
En total, $ 2.401.683.765. Lo que representa un 25% de los casi 10 mil millones de pesos del total de sus gastos declarados de campaña ($ 9.753.054.419).
En el caso de Evelyn Matthei, la ex ministra del Trabajo recibió directamente $ 2.967.388.828 en aportes reservados, con segunda vuelta incluida.
De esta forma, Matthei recibió 66% más de lo que obtuvo como aportes reservados directos a su campaña la actual mandataria ($ 1.781.111.214).
Si se hace un análisis más detallado, hay que agregar los $ 2.018.495.936 de aportes secretos para presidenciales que llegaron directamente a la tienda gremialista y que también incluyen la segunda vuelta.
Con un alcance: como la ex ministra asumió la candidatura de la UDI en representación de la Alianza recién en julio de 2013, tras la renuncia de Pablo Longueira a la carrera presidencial, no se puede decir cuánto de estos aportes fueron utilizados en la campaña de Matthei.
Pero sí es posible señalar que a las arcas de la candidatura 2013 de la Alianza, representada por un candidato UDI, llegaron $ 4.985.884.764 en aportes directos a la candidatura y al partido.
En cuanto a las primarias, Bachelet obtuvo otros $ 314.219.973, y su partido otros $ 34.373.370 en aportes secretos. De esta forma y tomando en cuenta todas las entradas, la campaña de la actual mandataria obtuvo $ 348.593.343 por esta vía.
En las primarias de la Alianza –en las que Matthei no participó– hay una clara ventaja de la UDI por sobre RN a la hora de recibir aportes reservados. Pablo Longueira obtuvo $ 709.803.425 bajo este ítem. Un 159% más de lo que recaudó Andrés Allamand (RN) ($ 274.586.095), que no fue elegido.
Una diferencia similar se produce en los aportes reservados que llegaron directamente a los partidos de la Alianza para las primarias y que iban dirigidas a las presidenciales. RN obtuvo $ 30.000.000, versus la UDI, que sumó $ 277.630.000, nueve veces más.
Las otras candidaturas a la Presidencia del 2013 recibieron montos bajísimos en comparación a los de la Nueva Mayoría y la Alianza. Es el caso de Marco Enríquez-Ominami, del PRO, que se adjudicó $ 324.000.000 bajo el polémico ítem, correspondientes a un 24% del total de su gasto de campaña ($ 1.327.767.413).
En tanto, los independientes Tomás Jocelyn-Holt y Franco Parisi obtuvieron 19 millones y 5 millones de pesos, respectivamente.
Tanto Roxana Miranda (P. Igualdad) como Marcel Claude (P. Humanista), Ricardo Israel (PRI) y Alfredo Sfeir (Partido Ecologista), no tuvieron aportes por esta vía.