El vocero de Gobierno insistió en el concepto expresado por Bachelet ayer
A la salida del Comité Político convocado para hoy, y en el que no participó el timonel PPD Jaime Quintana, el ministro Marcelo Díaz aseguró que hay un clima de unidad y convergencia entre las colectividades de la Nueva Mayoría, recalcando que el escenario financiero no es el esperado y por eso el Ejecutivo decidió actuar con «sensatez» para abordar los cambios estructurales que se prometieron.
Pasadas las 13:30 horas concluyó el comité político extraordinario que reunió a ministros, presidentes de partido y los secretarios generales de las colectividades de gobierno en La Moneda. La reunión se efectuó luego de que en el marco de un consejo de gabinete convocado ayer, la Presidenta Michelle Bachelet hablara de cambiar el rumbo de las políticas públicas, jerarquizando aquellas que se puedan realizar, teniendo en cuenta el complejo escenario económico. El anuncio generó críticas al interior de la Nueva Mayoría como las que hizo el senador del PPD Jaime Quintana, quien no asistió hoy por encontrarse en su región según explicaron en La Moneda.
Con todo, el vocero de gobierno salió a reforzar el discurso de que el escenario económico es el principal motivo para generar esta nueva «gradualidad» en las reformas, sin que ello signifique una renuncia. A la salida del encuentro, y flanqueado por Isabel Allende y Jorge Pizarro, Marcelo Díaz aseguró que
«La principal preocupación del gobierno es cuidar a Chile y a su gente y por lo tanto nos hacemos cargo de que el panorama económico nacional e internacional es más complejo. Nos hacemos cargo de las complejidades y dificultades que hemos tenido para poner en marcha muchas de esas reformas, que mantienen su legitimidad porque se hacen cargo de enfrentar una de las principales, sino el principal desafío que tiene Chile: la desigualdad», dijo
«La Presidenta ha dicho ayer que respecto de esos desafíos suyo y de su gobierno es que ese norte se mantiene y lo vamos a hacer haciéndonos cargo de que la realidad hoy es distinta a la que habíamos imaginado. Precisamente para poder cumplir es que vamos a introducir gradualidad y revisión de los ritmos», aclaró.
Díaz reconoció que «no sólo la economía» ha dificultado el proceso reformista sino que además «hemos tenido problemas de gestión con los partidos» y en esa línea se programó este encuentro y aseguró que vendrán otras instancias de debate, como el cónclave oficialista programado para los próximos días.
Más temprano en conversación con radio Cooperativa, el ministro dijo que «a lo mejor sobreestimamos la capacidad del Estado y del sistema político de procesar reformas estructurales tan profundas como las que estamos planteando en un periodo tan breve de tiempo».
También recordó que la mandataria fue precisa durante su intervención en el consejo de gabinete efectuado el viernes, ocasión en que reivindicó sus prioridades a nivel educacional, laboral y de salud entre otros planos sociales, pero que son asumidos con mayor gradualidad y responsabilidad.
«Aquí no hay sacrificio de los objetivos del Gobierno ni del programa. Uno hace promesas en campaña y la obligación es poder cumplirlas pero también en base a la realidad en la que le toca gobernar», dijo.
El vocero agregó que «no vamos a renunciar a los compromisos del programa de Gobierno, lo que vamos a hacer es introducir la dosis de sensatez respecto de los ritmos en que vamos a poder cumplir con esos compromisos».
En ese sentido, explicó que como gobierno esperaban niveles de crecimiento mayor, inversión y un contexto económico más favorable, lo cual no se han producido y destacó que el «sinceramiento» es también una «reafirmación de los puntos esenciales».
Díaz también precisó que cuando Bachelet regresó al país para asumir la candidatura presidencial lo hizo en base a una necesidad, ya que la sociedad nacional se encontraba en medio de un profundo malestar con las instituciones, situación que hoy reconoce.
El ministro indicó que «ese malestar social sigue estando en la base de nuestras preocupaciones», añadiendo que por eso las reformas deben ser «sustentables», dado el contexto económico que atraviesa el país.
«Lo que hace una familia cuando ve disminuidos sus ingresos es que jerarquiza sus prioridades y el país es una familia. Sin renunciar a nuestro horizonte programatico, lo que hacemos es introducir la variable responsabilidad, que es lo que uno espera y debe esperarse de un gobierno que actúa seriamente», explicó.
Mencionó que «nosotros hemos dicho que vamos a cumplir nuestros compromisos, que algunos requieren una gradualidad superior a la que habíamos planteado porque la economía nos da limitantes que son reales».
Respecto a los dichos del senador del MAS, Alejandro Navarro, quien dio a entender el fin de la Nueva Mayoría a raíz de la mencionada gradualidad en los compromisos de campaña.
«Vamos a estar el martes dialogando con nuestras bancadas parlamentarias y ojalá la mayoría de ellos nos acompañen, ojalá todos porque la prioridad del Gobierno es cuidar a Chile y su gente», anticipó.
Díaz dijo a priori esperar que la visita al Congreso Nacional sea vista con «buena voluntad y capacidad de discutir», «ser escuchados», ya que -afirmó- «no nos asusta el debate».
«Reconozco que esto puede generar algo de desazón y por eso hemos planteado un intenso ritmo de diálogo y conversación con todos los actores porque sabemos que explicar esto es fundamental para seguir adelante con la agenda de Gobierno», concluyó.
