El sacerdote jesuita que presidirá la ceremonia ecuménica de este viernes, afirmó que él no juzgaba intenciones, y que está convencido de que «a todo ser humano hay que darle una oportunidad».
«Familiares yo entiendo su dolor. Lamento sinceramente que -creo que no son todos- hay muchos que irán a juzgar previamente antes de saber lo que va a pasar. Y eso me duele porque ellos mismos son los que más piden que se arrepientan, que confiesen. Hay que dar la posibilidad, no juzguemos de ante mano. Ellos han sufrido demasiado, tienen derecho a pedir garantías», fueron las palabras del sacerdote jesuita Fernando Montes en CNN.
El ex rector de la Universidad Alberto Hurtado presidirá el encuentro ecuménico -junto con el pastor anglicano Alfred Cooper– que se dará este viernes en el penal Punta Peuco, donde seis reos que cumplen condena por delitos de lesa humanidad eventualmente pedirán perdón por los crímenes cometidos.
La mayoría de ellos son subalternos. Para Montes, pese a que intervinieron en actos delictivos, fueron «atrocidades en que ellos mismos fueron amenazados»: «Es muy distinto de quien planificó, organizó y dio las órdenes», dijo, por lo que cree que la justicia debe evaluar «los niveles de responsabilidad» de cada uno.
También cree que se debe sopesar la situación de quienes tienen problemas de salud: «Cuando hay una persona absolutamente incapacitada mentalmente o está con deterioro muy profundo es en razón de su propia humanidad y de nuestra propia humanidad tener consideración», afirmó.
El jesuita agregó que «aquel que tiene información, si tiene profundo arrepentimiento tiene que hacer posible la justicia. Tiene que ser un perdón que colabora. Yo no he hablado de amnistías ni de cortar penas».
Al ser consultado si es que sería una coincidencia que quienes pidan perdón sean quienes buscan tener beneficios carcelarios, Montes dijo que «no juzgo intenciones».
«Yo estoy convencido que todo ser humano hay que darle una oportunidad. Porque el castigo tiene una función ejemplar y sanatoria de convertir y transformar al delincuente», afirmó.
