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Uno de los puntos más tensos de la instancia fue cuando el titular de Justicia, tras ser reprendido por Hertz quien le dijo que «fue dictadura y no un gobierno militar, ministro», señaló, con su habitual estilo medido y calmo, que «uno puede hablar de dictadura, gobierno militar. El gobierno militar fue una dictadura, ¿o alguien cree lo contrario?».
Poco más de dos horas duró la interpelación, encabezada por la diputada comunista Carmen Hertz, al ministro de Justicia, Hernán Larraín, sobre las razones que tuvo el Gobierno para retirar el proyecto de ley que compensa económicamente a víctimas de violaciones a los derechos humanos ocurridas durante la dictadura militar.
La reconocida abogada de Derechos Humanos -cuyo marido fue asesinado en 1973 por la Caravana de la Muerte- comenzó su intervención con tono fuerte y claro, recordándole a Larraín los horrores vividos durante la dictadura militar -tema en el que insistió varias veces- y criticó que el retiro del proyecto, el cual tildó de miserable, se diera en el contexto de tres décadas de «sacrificio doloroso» por parte de los presos políticos.
Frente a esto, un medido, pausado y calmado Hernán Larraín inició su discurso destacando que es «sano para la democracia este ejercicio» y rápidamente se refirió a las descripciones de Hertz sobre las numerosas violaciones a los DD.HH. ocurridas en dictadura: «Los hechos ocurridos en el período 73-90, constituyeron una situación compleja, dura, por la brutalidad de las violaciones a los derechos humanos que tuvieron lugar en esa oportunidad. Eso merece nuestro profundo rechazo», dijo.
Luego, entre medio de abucheos del público, la presidenta de la Cámara de Diputados, Maya Fernández, tuvo que pedir silencio. Acto seguido, fue turno de Larraín y aprovechó su tiempo para citar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que según él celebraron los pasos dado por el Estado chileno en esta materia: «La Corte valora positivamente la política de reparación por violaciones a los derechos humanos», dijo el abogado.
Hertz insistió constantemente si haber retirado el proyecto del aporte «miserable y tardío» había sido lo correcto, ante lo cual el ministro enfatizó que todas las compensaciones «nunca serán suficientes, tenemos que buscar cómo llenamos estos vacíos. Aunque se aprobara el proyecto, las reparaciones no serían suficientes».
Adicionalmente, precisó que el Estado de Chile ha entregado, hasta la fecha, unos 6.170 millones de dólares, «yo diría que eso no es una cifra miserable».
«El gobierno militar fue una dictadura»
La jornada estuvo marcada por las protestas en la galería, donde se encontraban familiares y víctimas de la dictadura por un lado, los que gritaron «asesino», y el público que apoyaba a Larraín por el otro, el cual llevaba carteles con las leyendas «Fuerza Punta Peuco» y «Teillier asesino».
Este escenario obligó a que se suspendiera la sesión durante cinco minutos, para que tanto Hertz como Larraín pudieran exponer con tranquilidad.
Una vez regresada la normalidad, diputada le indicó al ministro que fue su sector el que apoyó la dictadura -frase que repitió durante casi toda su intervención- y violaciones a los derechos humanos, y detalló los crímenes ocurridos durante ese tiempo, en los que incluyó las torturas sufridas por las víctimas, las violaciones contra menores de edad, jóvenes y mujeres embarazadas, los ejecutados.
«La tortura fue la práctica generalizada, es el período de allanamientos masivos y respondieron a un patrón común, la tortura comenzaban a aplicarse desde el momento de la detención, en el intertanto golpes de pies y puños, en los recintos se les mantenía incomunicados», manifestó la diputada.
Y sin perder la calma, el secretario de Estado puntualizó, tras ser reprendido por Hertz quien le avisó que «fue dictadura y no un gobierno militar, ministro», que «uno puede hablar de dictadura, gobierno militar. El gobierno militar fue una dictadura, ¿o alguien cree lo contrario?», pero añadió que «ese no es el tema, hay que decidir si nos vamos a quedar en esos hechos o vamos a avanzar».
