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La fórmula de Piñera para la inteligencia nacional: un nuevo consejo encabezado por él mismo PAÍS

La fórmula de Piñera para la inteligencia nacional: un nuevo consejo encabezado por él mismo

La propuesta del Acuerdo Nacional sobre Seguridad Pública también plantea fuertes cambios en la ANI, con la creación del cargo de subdirector en el organismo, pero además con la “eliminación de los cargos de planta a través de medidas de incentivo al retiro”. En cuanto a las relaciones con la Comisión de Control del Sistema de Inteligencia del Estado de la Cámara Baja, se establecen informes semestrales, pero se endurecen las sanciones “a los parlamentarios o funcionarios del Congreso que vulneren su deber de reserva”.


La instalación de un Consejo Nacional de Inteligencia y fuertes cambios al interior de la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI) son parte de la batería de 150 anuncios del Gobierno como parte del Acuerdo Nacional sobre Seguridad Pública presentados este jueves por el Presidente Sebastián Piñera.

La mesa de trabajo fue constituida el 6 de abril pasado con la participación de actores de gobierno y oposición, parlamentarios, alcaldes, representantes del Ministerio Público, del mundo civil y académico, elaboró propuestas en materias como modernización y fortalecimiento de las policías, fiscalización y control de las armas de fuego, el rol de los municipios en la seguridad pública y la coordinación entre los actores del sistema de persecución penal.

En materia de inteligencia, el documento oficial parte de la premisa de que “el actual Sistema de Inteligencia del Estado (SIE) está basado en premisas que no responden a las necesidades actuales” por lo que “se considera imperativo avanzar hacia un sistema moderno, integrado y funcional (…) ante las nuevas amenazas de seguridad internas y externas, crimen organizado, terrorismo, narcotráfico, tráfico ilícito de migrantes, trata de personas, ciber ataques y protección de la infraestructura crítica del Estado”.

Nuevo organismo

En este sentido, Piñera anunció que se dispondrá la creación de un Consejo Nacional de Inteligencia, que tendrá “como finalidad asesorar directamente al Jefe de Estado en materias de inteligencia”.

Este nuevo organismo será presidido por el Presidente de la República y además estará integrado por el Ministro del Interior y Seguridad Pública, el director de la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI) y los jefes de los organismos que conforman el Sistema de Inteligencia del Estado (SIE), entre ellos el Servicio de Aduanas y Gendarmería.

Además, “para el solo efecto de aportar información orientada al análisis de inteligencia”, según precisa el Ejecutivo, también formarán parte del nuevo organismo la Unidad de Análisis Financiero (UAF) y el Servicio de Impuestos Internos (SII).

Ajuste en la ANI

La propuesta también plantea fuertes cambios en la ANI, con la creación del cargo de subdirector en el organismo. Otra medida es la “eliminación de los cargos de planta de dicho organismo, a través de medidas de incentivo al retiro”, que considera establecer “un régimen de contratación más adecuado a la naturaleza propia de la ANI, similar al actualmente existente en la Contraloría General de la República”.

De acuerdo a la propuesta, el objetivo es “potenciar una administración más flexible del recurso humano de la ANI, para adecuarse a las fluctuantes necesidades propias de su función y potenciar el ingreso y permanencia del personal idóneo con las competencias apropiadas”.

Otras medidas del plan son diseñar una Estrategia Nacional de Inteligencia, la que será elaborada por el director de la ANI, en consulta con los Ministros del Interior y Seguridad Pública, RR.EE. y Defensa, y que deberá ser aprobada por el Presidente de la República.

Además, el director de la ANI, con la participación del Comité de Inteligencia, tendrá como tarea elaborar cada 4 años un Plan Nacional de Inteligencia, y además tendrá atribuciones para exigir información a los órganos del SIE “y su incumplimiento será informado al Presidente de la República”.

En paralelo, se considera la “creación de mecanismos de contrapeso y control, particularmente de aquellos radicados en el Congreso Nacional”, obligando así a que los informes que debe rendir el jefe de la ANI ante la Comisión de Control del Sistema de Inteligencia del Estado de la Cámara Baja sean al menos semestrales. Sin embargo, a la vez plantea que “se agravarán sustancialmente las sanciones a los parlamentarios o funcionarios del Congreso que vulneren su deber de reserva acerca de lo que ahí se informe”.

Asimismo, se dispondrá que el director de la ANI informe semestralmente a una Comisión Especial del Senado, sobre el cumplimiento del Plan Nacional de Inteligencia.

Las modificaciones planteadas además significarán cambios a la Ley Nº 19.974, sobre el Sistema de Inteligencia del Estado (SIE) y la Agencia Nacional de Inteligencia, y a la Constitución.

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