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Crédito: Vía Twitter @ministeriodesalud
El Mandatario midió sus palabras al comentar el inicio de las conversaciones con la presidenta del Senado, apelando a valorar el avance hacia un “marco de entendimiento”, pero siempre recalcando el respeto a la “institucionalidad” y la separación de poderes. Entre los contenidos abordados en las reuniones de ayer, que también incluyeron a Chile Vamos y sus presidenciables, pymes y representantes de sociedad civil, el Jefe de Estado mencionó al menos seis, pero sin referirse nunca a una renta universal de emergencia o renta básica, que según dio a entender la senadora es el corazón del acuerdo. Sólo habló de aumentar la cobertura del IFE al 100% de las familias del Registro Social de Hogares, “cubriendo a gran parte de nuestra clase media”. Antes, la presidenta del Senado, Yasna Provoste, volvió a defender la apertura del diálogo con el Ejecutivo, señalando que “nadie que aprecie la democracia, puede restarse de un proceso de diálogo, eso no es cocina”.
Si bien se esperaba que diera una declaración en la noche de ayer, al cierre de la ronda de reuniones iniciadas con el Congreso para sortear la crisis, finalmente el Presidente Sebastián Piñera aprovechó el balance diario del Covid-19 del día de hoy encabezado por el ministro de Salud, Enrique Paris, para referirse al tema.
Sin hablar de la “agenda de mínimos comunes”, como la definió la presidenta del Senado Yasna Provoste, ni tampoco de la “ayuda universal”, que sería el mecanismo concreto a poner en marcha, el Mandatario midió sus palabras, apelando a valorar el avance hacia un “marco de entendimiento”, pero siempre recalcando el respeto a la “institucionalidad” y la separación de poderes.
“Todos sabemos la importancia de cuidar y proteger nuestra institucionalidad, actuar con responsabilidad, respetar las atribuciones de los poderes del Estado”, dijo.
En esta línea, remarcó que “queremos ratificar nuestra plena disposición a dialogar y llegar a acuerdos, para que en lugar de enfrentarnos unos con otros, unamos nuestras fuerzas».
Entre los contenidos abordados en las reuniones de ayer, que también incluyeron a Chile Vamos y sus presidenciables, pymes y el Jefe de Estado mencionó al menos seis: extender la red de protección social, aumentando la cobertura del Ingreso Familiar de Emergencia al 100% de las familias del Registro Social de Hogares, “cubriendo a gran parte de nuestra clase media”; extender el beneficio del posnatal; fortalecer la ayuda a pequeñas y medianas empresas; aportar más recursos al sector salud y reducir listas de espera; trabajar en la recuperación del empleo; y además avanzar en mecanismos para recuperar los fondos de pensiones, tras los retiros.
“Todos estos objetivos los hemos conversado, y requieren recursos adicionales. Es necesario recaudar más recurso, a través de un acuerdo tributario, poniendo énfasis en reducir exenciones”, indicó, confirmando así el mecanismo de recaudación.
El diálogo abierto entre el Gobierno y el Congreso tiene como protagonista a la presidenta del Senado, Yasna Provoste, a quien el Mandatario no nombró explícitamente en su versión de hoy.
Este sábado Provoste nuevamente salió a defender el proceso de acercamiento con el Ejecutivo, el cual se hará a través del Comité Político en un contexto exclusivamente institucional, vale decir el Congreso, según remarcó.
En ese contexto, la senadora volvió a rechazar el mote de “cocina” que han empleado para denostar el proceso de entendimiento que se está estableciendo con el Gobierno, tal como lo hizo ayer en forma presencial y en redes sociales, respondiendo así a las aprensiones lanzadas por la diputada humanista Pamela Jiles. “Aquí no hay ninguna negociación, porque las necesidades de la ciudadanía no son negociables”, indicó Provoste en conversación con CHV Noticias.
Y la senadora también reivindicó el valor del diálogo en una democracia. “Soy absolutamente contraria a esos espacios de negociación a puertas cerradas, sin que la ciudadanía sepa y por lo tanto, también en esta responsabilidad que me ha tocado asumir hemos tenido especial consideración con una lógica en donde las cosas se establezcan. Nadie que aprecie la democracia, nadie que quiera contribuir a la solución de los problemas más urgentes que tiene la ciudadanía puede restarse de un proceso de diálogo, eso no es cocina, es democracia”, expresó.
“Esta es una contribución sobria, sin esta lógica de los acuerdos nacionales rimbombantes. Acá hay una agenda en mínimos comunes urgentes”, remarcó.
