
Ley de Fármacos vuelve a punto muerto por falta de unanimidad en comisión
La Comisión Mixta de la Ley de Fármacos II logró quórum tras años de estancamiento, pero la reapertura del debate dependerá de la unanimidad de diputados y senadores. Sigue la preocupación por la vinculación con un caso judicial. Se propuso que asesores declaren intereses para evitar conflictos.
No fue una nueva sesión fallida. Esta vez, al menos, hubo quórum. Diputados, senadores y la ministra de Salud asistieron a la Comisión Mixta de la Ley de Fármacos II, proyecto que ingresó al Congreso hace nueve años y que, pese a ciertos avances, aún no ve la luz. Y todo indica que no lo hará pronto.
Este miércoles hubo avances, la promesa de retomar el tema y conformar una mesa técnica, aunque, en la práctica, se trata de un nuevo punto muerto, o con pocos signos vitales. La idea es, primero, reabrir y someter a votación los temas que generan arritmia.
El problema es que, si no hay total consenso entre senadores y diputados para la reapertura, se producirá un paro cardíaco. El presidente de la comisión, senador Francisco Chahuán (RN), dijo que el seguro es la unanimidad. Es decir, “basta con que un miembro de esta comisión, senador, senadora, diputado o diputada, diga que no está dispuesto a repetir el debate y hasta ahí llegó la discusión”.
La sesión de este 12 de marzo estuvo marcada por la necesidad de actualizar y revisar ciertos puntos clave del proyecto, el cual ha enfrentado retrasos debido a disensos, observaciones de la Corte Suprema y –la principal preocupación de los parlamentarios– la judicialización de la iniciativa.
Se trata del caso de la abogada Andrea Martones, quien hasta 2022 asesoró ad honorem a algunos senadores de la legislatura anterior mientras revisaban la Ley de Fármacos II y que actualmente enfrenta una querella –presentada por la Asociación Gremial de Químicos Farmacéuticos y Dueños de Farmacias Independientes (AFFI), representada por el exfiscal Carlos Gajardo– por tráfico de influencias y posible cohecho, debido a que en paralelo a la discusión se revelaron pagos de laboratorios farmacéuticos.
A raíz de este antecedente, y como novedad de la última sesión, el senador Juan Luis Castro (PS) apoyó la postura manifestada por el diputado Andrés Celis (RN) y propuso que los asesores designados por los parlamentarios y el ministerio realicen una declaración de intereses para evitar conflictos. “Esto no va a ser un libro abierto, pero sí debemos discutir los temas prioritarios con total claridad”, enfatizó. La propuesta también fue respaldada por el senador Chahuán, quien se comprometió a garantizar la transparencia en la comisión técnica.
Entre los puntos principales que podrían ser reconsiderados están la regulación de precios de medicamentos, la fijación de tarifas de dispensación, la prescripción por Denominación Común Internacional (DCI) y la intercambiabilidad de fármacos. Además, se debatirá sobre los plazos de reglamentos, la integración vertical y la creación de un Observatorio Nacional de Medicamentos.
El senador Castro recalcó que este proyecto lleva años sin resolverse, debido a diversas trabas legales y regulatorias. “Es razonable avanzar en esta dirección, porque a todos nos interesa que esto ocurra. Hay una necesidad social urgente de que exista esta ley”, enfatizó. El parlamentario también destacó la importancia de la prescripción por DCI y la regulación de precios como temas prioritarios en la discusión.
Por su parte, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, reafirmó el interés del Ejecutivo en la aprobación del proyecto. Dijo que en La Moneda ven con buenos ojos el avance de la iniciativa tal como está. No obstante, la secretaria de Estado precisó que “si existía la disposición por parte de los parlamentarios de reabrir el debate, el Ministerio de Salud, nosotros, estamos dispuestos a colaborar en esa discusión para mejorar el proyecto”.
El senador Sergio Gahona (UDI) remarcó que primero se establezca la mesa de trabajo para definir qué temas serán efectivamente discutidos, en línea con su par, el senador Javier Macaya, quien fue claro en decir que no está disponible para abrir cualquier punto. “No necesariamente vamos a coincidir en todo, y ese acuerdo sobre los temas a reabrir aún no está claro”, advirtió.
“El voto que yo estoy dando acá me va a costar caro”
Uno de los puntos más sensibles de la sesión fue la intervención del diputado Celis, quien inicialmente se mostró reticente a la reapertura del debate, debido a que el proyecto de ley está vinculado a una investigación del Ministerio Público.
“El voto que yo estoy dando acá me va a costar caro, en cuanto a que yo soy denunciante en esta causa. Entonces, no van a entender mi posición, pero voy a confiar en esta comisión, en cuanto a que hay nuevos miembros, nuevos parlamentarios, nueva ministra, nuevo Gobierno, y creo que la gente merece precios bajos, y por ese fundamento es que yo me atrevo a sumarme a este acuerdo”, dijo.
El senador Chahuán aseguró que el trabajo de la comisión técnica será eficiente y que en un plazo máximo de dos semanas se definirán los temas que podrán ser reabiertos. “No podemos permitir que este proyecto de tanta importancia quede en la vaguedad. Me comprometo a que esta comisión resuelva el tema en el menor tiempo posible”, concluyó.
La próxima sesión de la Comisión Mixta será clave para determinar si la reapertura del debate es aprobada y cómo se desarrollará el trabajo técnico en torno a la Ley de Fármacos II, una iniciativa largamente esperada por la ciudadanía.