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Colo Colo viajó este lunes a Ecuador para enfrentar el miércoles a Delfín, para el partido del Grupo 2 de la Copa Libertadores, con la necesidad de ganar para evitar la eliminación.
El equipo albo, que viaja con Héctor Tapia como técnico provisional tras la salida del argentino Pablo Guede, es el colista del grupo con sólo un punto en tres partidos y su misión es poco menos que imposible, teniendo en cuenta de que el equipo de la ciudad de Manta ya le ganó en Santiago (0-2).
No obstante, sus integrantes derrocharon optimismo en la hora de la despedida, en el aeropuerto de Santiago.
«Estamos con el ánimo muy alto, estamos bien y esperamos traernos los tres puntos desde Ecuador que son muy importantes para nosotros», dijo el experimentado goleador Esteban Paredes a los periodistas.
«El plantel está bien, esperamos de que el equipo mejore y lo haga de buena manera, nosotros estamos mentalizados en ganar el partido», añadió, aunque admitió que el partido del miércoles «es la última chance, todos lo sabemos».
«Tenemos que ganar los tres partidos que restan para clasificar, y el partido del miércoles va a ser muy difícil», subrayó.
Colo Colo empató como visitante 0-0 con Curicó Unido este fin de semana, en la undécima jornada del torneo local, con lo que sumó 20 puntos y está cuarto en la clasificación, a ocho puntos del líder Universidad Católica.
Para el partido de Manta, Tapia planea algunas modificaciones en el once titular, del que saldría el argentino Juan Manuel Insaurralde, que dejaría su puesto en la defensa a su compatriota Fernando Meza.
También retornarían a la titularidad los centrocampistas César Pinares, Jaime Valdés y Óscar Opazo, mientras en lo táctico, jugaría con sólo un delantero en punta, Esteban Paredes.
De este modo, una formación probable del equipo chileno ante el Delfín sería con Agustín Orión; Matías Zaldivia, Julio Barroso, Fernando Meza; Óscar Opazo, Carlos Carmona, Claudio Baeza, César Pinares, Jaime Valdés; Jorge Valdivia y Esteban Paredes.
