La tarde de este lunes, la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó el proyecto de ley que modifica el Código del Trabajo para permitir a las y los trabajadores ausentarse de sus labores en caso de la muerte de una mascota o animal de compañía.
La iniciativa -conocida como Ley Duque- fue respaldada por 109 votos a favor, 7 en contra y 6 abstenciones, y ahora pasará al Senado para su segundo trámite legislativo.
En contra se pronunciaron los diputados republicanos Cristián Araya, Juan Irarrázaval, Benjamín Moreno, Agustín Romero, Luis Sánchez y la diputada UDI Flor Weisse. En tanto, se abstuvieron los libertarios Johannes Kaiser, Leonidas Romero y Gonzalo de la Carrera, junto con los RN Jorge Durán, Juan Fuenzalida y Paula Labra.
Tras la votación, el presidente de la Cámara Baja, José Miguel Castro (RN), celebró la aprobación del proyecto y destacó su enfoque humano: “Se hayan sensibilizado las distintas personas para aprobar esta ley. Muy felices porque esta ley no habla de darle un beneficio a la mascota, es un beneficio para las personas”. Agregó además que con su aprobación “se da sensatez y se da un paso más a esta sociedad para ir creciendo”.
Una de las impulsoras de la iniciativa fue la diputada Carolina Marzán (PPD), quien defendió su importancia emocional y social. “El proyecto que yo ingreso y que se refunde con otros no surge necesariamente de la situación que le afectó al perro del conocido conductor de televisión (José Antonio Neme). Es una motivación que nace desde hace mucho tiempo”, señaló.
Marzán añadió que, según diversos estudios, “es evidente que cuando una mascota fallece, el dolor es real y profundo. Impacta la emocionalidad de las personas, afecta su ánimo, su vida familiar y también su desempeño laboral”. Por ello, enfatizó que “se trata de un duelo verdadero, que requiere un tiempo mínimo de respeto, un tiempo mínimo de contención. Por eso este proyecto plantea un cambio concreto”.
La parlamentaria adelantó, además, que “hay que seguir avanzando y esperamos muy pronto votar el registro nacional de condenados por maltrato animal”.
Sin embargo, el proyecto no estuvo exento de críticas. Uno de los detractores fue el diputado Cristóbal Urruticoechea (Partido Nacional Libertario), quien generó molestia en la sala al afirmar que “estamos viviendo una especie de locura colectiva llegada desde otros países. Chile no era así (…) ahora llegamos a que, si se muere mi lagarto, me tienen que dar un día de permiso laboral”.
“La humanización del animal es lo que estamos viendo en este proyecto (…) el ser humano es superior a cualquier animal”, expresó. En esa línea, sostuvo que desde su sector defienden “seguridad jurídica y penas proporcionadas contra el maltrato de los animales. Sí a la pesca, sí a la caza, sí al rodeo y sí a las carreras de galgos. No a los colectivos ideologizados relacionados con el cuidado animal”, planteó.
Desde el Partido Republicano, el diputado Cristián Araya también cuestionó el momento en que el proyecto fue priorizado: “Que este proyecto de ley tenga urgencia legislativa es un verdadero escándalo, porque es priorizado a dos semanas de la elección (…) esto es populismo para la galería”, criticó.