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Uno de cada cinco hogares en Chile enfrenta inseguridad alimentaria: Red de Alimentos llama a actuar Alimentos Créditos: El Mostrador.

Uno de cada cinco hogares en Chile enfrenta inseguridad alimentaria: Red de Alimentos llama a actuar

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En el Día Mundial de la Alimentación, Red de Alimentos advierte que niños, niñas y adultos mayores son los más afectados por la inseguridad alimentaria en Chile, y llama a fortalecer la cooperación entre Estado, empresas y sociedad civil para rescatar y donar alimentos.


Aproximadamente uno de cada cinco hogares en Chile sufre algún grado de inseguridad alimentaria, según la Encuesta Casen. En el marco del Día Mundial de la Alimentación, Red de Alimentos, la primera organización de su tipo en el país, hizo un llamado a reforzar la cooperación entre Estado, empresas y sociedad civil para impulsar el rescate y donación de alimentos.

“Como Red de Alimentos estamos convencidos de que la alimentación es un catalizador de desarrollo y bienestar para la vida de un ser humano. Comer suficiente, seguro y nutritivo es el punto de partida para una vida más plena”, afirma la gerenta general de la Red, Alicia Hidalgo.

Entre los factores que profundizan la inseguridad alimentaria se encuentran los altos costos de la canasta básica –que hoy bordean los 70.000 pesos por persona–, las desigualdades territoriales que encarecen los productos en zonas rurales y periféricas, la falta de información para planificar dietas saludables y un marco regulatorio que aún necesita incentivos más claros para fomentar la donación antes de que los alimentos se desperdicien.

A nivel global, Naciones Unidas y la FAO alertan que 733 millones de personas viven con hambre. Paralelamente, el aumento de la obesidad y el desperdicio generalizado de alimentos evidencian un sistema desequilibrado, donde abundancia y escasez coexisten, a menudo una junto a la otra.

Niños y adultos mayores, los más afectados

Los niños y niñas son uno de los grupos más vulnerables frente a la inseguridad alimentaria, dado que su desarrollo físico y cognitivo depende de una nutrición adecuada. La falta de acceso a alimentos suficientes y nutritivos puede derivar en desnutrición, bajo rendimiento escolar y mayores riesgos de enfermedades a corto y largo plazo.

De manera similar, los adultos mayores enfrentan limitaciones físicas, económicas y sociales que dificultan su acceso a alimentos. Muchos viven solos o con ingresos reducidos, lo que aumenta su dependencia de programas de asistencia y redes solidarias. La seguridad alimentaria en este grupo es clave para mantener autonomía, prevenir enfermedades crónicas y garantizar un envejecimiento digno, señalan desde Red de Alimentos.

“Ambos representan los extremos de la vida en los que la autonomía es limitada, y por tanto, la falta de alimentos se transforma en una situación de vulnerabilidad profunda. Niñas, niños y personas mayores requieren respuestas específicas; son quienes menos poder tienen para resolver por sí mismos la falta de alimentos. Esto es aún más urgente si consideramos que el país está envejeciendo con rapidez: por cada 100 niñas y niños hay 79 personas mayores de 65 años, lo que obliga a adaptar la oferta social y alimentaria”, explica Alicia Hidalgo.

“Chile es capaz de enfrentar grandes desafíos”

Red de Alimentos ha desarrollado un modelo integral que articula la industria con la sociedad civil. Desde hace quince años, conecta a más de 240 empresas con más de 1.700 puntos de entrega en todo Chile, asegurando que alimentos y productos de higiene lleguen de forma trazable, segura y digna a quienes más los necesitan. A través de Despensas Sociales, el centro de distribución en San Bernardo y un canal digital de retiro directo en tiendas, la organización permite que más de 230.000 personas accedan cada año a productos que transforman su nutrición y bienestar.

“Cada alimento rescatado representa una oportunidad de conectar necesidad con oportunidad y de demostrar que la solidaridad puede ser también un modelo de gestión eficiente y sostenible”, enfatiza Hidalgo. Este año, la Red ha ampliado su trabajo al rescate agrícola, recuperando frutas y verduras directamente desde el campo, y fortaleciendo la educación alimentaria como herramienta de transformación social.

“Transformar los sistemas alimentarios requiere coordinación, trazabilidad y eficiencia, desde el rescate que se genera en empresas e industrias hasta la mesa. En línea con el llamado global del Día Mundial de la Alimentación realizado por FAO este 2025 debemos ‘trabajar mano a mano’ por alimentación para todos. Chile ha demostrado en distintos momentos de su historia que es capaz de enfrentar grandes desafíos relacionados con la alimentación”, señala la ejecutiva.

Desde 2010, Red de Alimentos ha entregado más de 97 millones de kilos de alimentos y artículos de primera necesidad, evitando el desperdicio y ayudando a personas en situación de vulnerabilidad en todo el país. Solo en los últimos doce meses se rescataron 14,9 millones de kilos de alimentos, un esfuerzo que además ha tenido un impacto ambiental positivo, equivalente a evitar la emisión de 215 mil toneladas de CO₂ en 15 años.

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