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Probióticos: qué son, para qué sirven y cómo incorporarlos en la dieta según expertas Salud www.freepik.es

Probióticos: qué son, para qué sirven y cómo incorporarlos en la dieta según expertas

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Los probióticos se han convertido en un tema central en nutrición, pero aún existen dudas sobre sus beneficios, diferencias con los prebióticos y formas seguras de consumo. Una académica de la Universidad Andrés Bello entrega cinco claves para comprender su impacto en la salud.


Resumen
Síntesis generada con OpenAI
Los probióticos han adquirido un papel relevante en la nutrición y la industria alimentaria, pero aún existen dudas sobre su funcionamiento y beneficios reales. La nutricionista Oriana Monsalve explica que estos microorganismos vivos contribuyen a modular el sistema inmune, mejorar la microbiota intestinal y reducir procesos inflamatorios. También están presentes en alimentos fermentados y pueden recomendarse como suplementos en casos específicos, como disbiosis o tratamientos con antibióticos. Aunque son seguros para la mayoría, requieren supervisión en personas inmunodeprimidas.
Desarrollado por El Mostrador

En los últimos años, los probióticos han ganado protagonismo en el área de la industria alimentaria y nuevas tendencias de productos alimenticios y nutracéuticos. Sin embargo, aún existen dudas sobre qué son exactamente, cómo se diferencian de los prebióticos y cuáles son sus beneficios reales. Para aclarar estas interrogantes, Oriana Monsalve, académica de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Andrés Bello, sede Viña del Mar, entrega cinco claves esenciales para comprender este tema.

Cinco claves para entender qué son los probióticos, sus beneficios y cómo consumirlos de forma segura

1. ¿Qué son los probióticos y cómo se diferencian de los prebióticos?

“Los probióticos, en términos simples, son microorganismos vivos que, cuando se administran en cantidades adecuadas, aportan beneficios a la salud del consumidor”, explica la nutricionista. Estos ingredientes se han utilizado de manera segura en la industria alimentaria por más de cien años, especialmente en productos lácteos y fermentados.

Por su parte, los prebióticos son ingredientes alimentarios selectivamente fermentados, que resultan en cambios específicos en la composición y/o actividad del microbiota intestinal “Son carbohidratos, principalmente polisacáridos, que se fermentan en el microbiota intestinal y estimulan el crecimiento de bacterias asociadas al bienestar”, agrega la especialista. Ejemplos comunes son la inulina y los fructooligosacáridos (FOS) presentes en alimentos como alcachofas, achicoria y acelgas.

2. ¿Por qué los probióticos son importantes para la salud?

Los probióticos cumplen un rol clave en la interacción entre microbiota intestinal y sistema inmune. “Participan en la modulación inmunológica, reducen procesos inflamatorios y fortalecen la Microbiota intestinal, evitando que microorganismos patógenos atraviesen el epitelio”, señala Monsalve. Además, producen ácidos orgánicos que disminuyen el pH colónico, lo que dificulta la colonización por patógenos.

Su aplicación va más allá de la modulación del microbiota intestinal, dice la experta. “Hoy sabemos que los probióticos también influyen en la salud oral, femenina e incluso mental, por su relación estudiada con la ansiedad y la depresión”, comenta.

3. ¿Dónde encontrarlos de manera natural?

“Los encontramos en alimentos fermentados como yogurt con cultivos vivos, kéfir, chucrut y kimchi”, indica la académica de la Universidad Andrés Bello. También se incorporan en bebidas vegetales, cereales y fórmulas infantiles, gracias a la innovación en la industria alimentaria.

Eso sí, la profesional aclara una confusión frecuente: “Un alimento fermentado no siempre es sinónimo de probiótico. Para que lo sea, debe contener microorganismos vivos que sobrevivan a las condiciones ambientales a nivel digestivo y aporten beneficios comprobados”.

También podemos encontrar probióticos a partir de la industria de los nutracéuticos (suplementos probióticos) recomendados en casos específicos, como ocurre cuando existe un desequilibrio a nivel intestinal o tratamientos que afecten la microbiota.

4. ¿Es necesario consumir suplementos?

En personas sanas, la dieta suele ser suficiente. “Los alimentos fermentados aportan probióticos naturales y otros nutrientes que los suplementos no consideran”, afirma Monsalve. Sin embargo, hay casos donde se recomienda la suplementación: “Por ejemplo, tras tratamientos con antibióticos, en diarreas agudas, síndrome de intestino irritable, alergias o disbiosis intestinal, siempre con el acompañamiento de un profesional de la salud especializado”.

5. ¿Todos pueden consumir probióticos?

Aunque son seguros para la mayoría, existen excepciones. “En personas inmunodeprimidas se requiere supervisión médica”, advierte Monsalve. También se debe tener precaución en casos de alergias a ciertos componentes de los suplementos o tratamientos inmunosupresores.

Sin duda que los probióticos son aliados importantes para la salud digestiva y general, pero su consumo debe ser informado

Un consumo informado para aprovechar sus beneficios

Los probióticos pueden ser grandes aliados para la salud intestinal, inmune y general, siempre que se consuman de manera adecuada, según la evidencia y con orientación profesional cuando corresponde. La educación nutricional, el uso responsable de suplementos y la elección de alimentos fermentados con cultivos vivos permiten aprovechar sus beneficios reales y evitar expectativas poco realistas. Entender cómo funcionan y cuándo utilizarlos es clave para integrarlos de forma segura en la vida cotidiana.

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