Frente al conflicto desatado en la empresa del call center «Konecta» que afecta a cientos de trabajadores, el diputado Guillermo Teillier (PC) llamó a detener la «represión y desprotección» de los funcionarios que ahí laboran.
«No es posible que nuevamente ante una protesta sindical y la desesperación de trabajadores que no reciben un trato justo, el Gobierno responda con amenazas, amedrentamiento y anuncios de que aplicará todo el rigor de la ley y la Ley de Seguridad del Estado», sostuvo el parlamentario.
Asimismo, indicó que «no se puede soslayar que son 700 trabajadores, en su mayoría mujeres, que no obtienen respuesta de ese call center de origen español a la demanda de un legítimo aumento salarial, pese a que la empresa tiene ganancias por cientos de millones de dólares, y tampoco encuentran puertas abiertas al diálogo, frente a la inoperancia de la Dirección del Trabajo».
Teillier agregó que «nadie desea que haya protestas como la de ocupar zonas del Metro, pero la solución a eso es dialogar con los trabajadores, buscar soluciones, entregar reajustes justos y no reprimir, amedrentar y amenazar con la aplicación de leyes autoritarias y la cárcel para los representantes de los trabajadores».
El legislador dijo conocer la información de los dirigentes sindicales de «Konecta» en el sentido de que «ni la Dirección del Trabajo, ni la empresa ni la ministra del Trabajo hicieron una gestión que apuntara a la solución de una huelga que se extiende por varios días y que, en cambio, se optara por medidas como desplazar Fuerzas Especiales de Carabineros para reprimir las manifestaciones».
Además, manifestó que «esta parece ser una constante del Gobierno, que no tiene agenda laboral y que no hace nada por los trabajadores, y piensa que con leyes de seguridad, con la aplicación de la fuerza pública y con represión va a arreglar las cosas».
Añadió que «no extraña la coincidencia de una empresa que no quiere subir los sueldos con el Gobierno que no quiso reajustar dignamente el salario mínimo. Están coordinados en no responder como se debe a las necesidades de los trabajadores».
El diputado exigió «respeto para los dirigentes sindicales y el respeto a sus garantías ciudadanas y no exacerbar el conflicto y menos desde el Gobierno» y planteó «la solidaridad con los trabajadores en sus justas demandas».
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