Crisis europea hace peligrar exportaciones de Estados Unidos y amenaza recuperación económica
Los exportadores estadounidenses de Dow Chemical Co. a Hewlett-Packard Co. se preparan para una nueva caída de la demanda europea en tanto la profundización de la crisis de deuda de la región amenaza con desarticular una fuente de fortaleza para la economía de los EE.UU.
JPMorgan Chase Co. rebajó su pronóstico de crecimiento para el segundo trimestre de 2,5 por ciento a 2 por ciento la semana pasada, en parte debido al deterioro de la balanza comercial. Este mes, había reducido su estimación para el tercer trimestre de 3 por ciento a 2 por ciento, “explicando gran parte de la revisión a la baja por una expectativa de que el ritmo de crecimiento de las exportaciones se frenará”, expresó en una nota de investigación del 1º de junio el economista jefe para EE.UU. Michael Feroli.
Las exportaciones estadounidenses a la Unión Europea de 27 países cayeron 4,8 por ciento en el año que terminó en abril, el peor desempeño de doce meses desde noviembre de 2009, muestran las cifras del Departamento de Comercio. En cambio, las exportaciones estadounidenses totales subieron 3 por ciento en abril respecto del mismo mes del año pasado. La caída en Europa coincide con la desaceleración del crecimiento en otros mercados importantes para los productos estadounidenses, como China y Brasil.
“La caída en Europa debilitará nuestras exportaciones en el largo plazo”, señaló Michelle Meyer, economista sénior para EE.UU. en Bank of America Corp. de Nueva York. “Prevemos que el déficit comercial crecerá no sólo para la zona euro sino también para las economías en desarrollo”, agregó, en consonancia con su pronóstico de que la economía estadounidense se desacelerará de un ritmo anual de 1,9 por ciento en el primer trimestre a un crecimiento de sólo 1 por ciento para fin de año.
Contenedores con destino al exterior
La mayor debilidad de las ventas europeas también se refleja en los volúmenes de contenedores provenientes de puertos estadounidenses de la costa este con destino al exterior, que se redujeron 2,6 por ciento interanual en abril luego de una caída de 0,9 por ciento en marzo, según los datos que reunió Bloomberg News.
La caída de la demanda europea recién comienza a notarse en los datos comerciales porque habitualmente lleva de tres a seis meses enviar los productos después de recibir una orden de compra, según Gary Hufbauer, miembro sénior del Instituto Peterson de Economía Internacional de Washington.
Las acciones europeas sufrieron pocos cambios en tanto el rendimiento de los bonos españoles a diez años trepaba por encima del 7 por ciento por primera vez desde la creación del euro y se disipaba el optimismo de que las elecciones griegas iban a calmar la crisis de la zona euro.
En abril, más préstamos españoles quedaron impagos, según los datos publicados ayer por el Banco de España, lo que sugiere que la recesión del país está obligando a más compañías y consumidores a incumplir los pagos.
Además de la mayor debilidad de la demanda, los exportadores estadounidenses también se verán perjudicados por la caída del euro, lo que encarece los productos estadounidenses en Europa, dijo Hufbauer. “Va a bajar del valor que tiene ahora y eso afectará las exportaciones de EE.UU.”.