Salud pélvica: llega a Chile tratamiento seguro y sin cirugía para rejuvenecimiento e incontinencia

En un escenario donde la salud íntima femenina gana espacio como parte esencial del bienestar integral, el tratamiento HIFU  (Ultrasonido Focalizado de Alta Intensidad) se posiciona como una alternativa innovadora, segura y eficaz, que ya comienza a implementarse en clínicas chilenas.

El HIFU íntimo es un tratamiento no invasivo que se está posicionando como una alternativa innovadora para el cuidado de la salud íntima femenina. Utiliza tecnología de ultrasonido de alta precisión para estimular el colágeno y regenerar los tejidos de la zona vaginal, sin necesidad de cirugía ni tiempo de recuperación.

Asimismo, es una tecnología no invasiva que ha revolucionado los tratamientos estéticos faciales y corporales. Su aplicación en estética busca reafirmar la piel, reducir la flacidez y estimular la producción natural de colágeno, sin necesidad de cirugía ni tiempo de recuperación prolongado.

Muchas veces este procedimiento se utiliza como tratamiento estético en zonas como la cara ya que logra un efecto similar al de un “microlifting”, pero sin necesidad de pasar por el quirófano. Este tratamiento se basa en la aplicación de ultrasonido de alta frecuencia y energía sobre la piel, lo que permite remodelar el tejido en profundidad a través de calor focalizado.

Uso de HIFU en zona intima

Javiera Arias, matrona de Clínica Costa Verde y especialista en este procedimiento, explica que se trata de una técnica mínimamente invasiva que “utiliza energía focalizada de alta intensidad para estimular los tejidos del canal vaginal, promoviendo la producción de colágeno y elastina”.

Lo anterior se traduce en beneficios como la disminución de la incontinencia urinaria, mejor tono muscular, hidratación vaginal, mayor satisfacción sexual y, por sobre todo, “la recuperación de la seguridad y confianza en sí mismas de nuestras usuarias”. 

Aunque el procedimiento en sí dura cerca de 15 minutos, se enmarca dentro de una atención integral de una hora, en la que se revisa la historia ginecológica de la paciente para ofrecer un tratamiento personalizado y adaptado a sus necesidades. Aunque se recomienda un ciclo de tres sesiones y un mantenimiento anual, la experta asegura que muchas usuarias “reportan beneficios desde la primera sesión”.

Resultados visibles y alta satisfacción

Según la experta, los resultados de este procedimiento son evidentes. “Se observa una mejor calidad de los tejidos, mayor lubricación durante la actividad sexual, y muchas pacientes reportan una disminución significativa en las pérdidas de orina. Además, 9 de cada 10 mujeres afirman haber experimentado beneficios incluso más allá del motivo que las trajo a consulta”.

Ante los temores iniciales, especialmente el miedo al dolor, Arias aclara que el tratamiento es bien tolerado por las pacientes y no requiere anestesia. “Nuestra consulta es completamente integral y respetuosa. El procedimiento es seguro y confortable, y más del 90% de las usuarias lo recomiendan a sus amigas o familiares”, agrega.

Cuidado íntimo en etapas clave y con enfoque educativo

Cabe destacar que el HIFU íntimo está especialmente indicado para mujeres adultas, en particular aquellas que se encuentran en etapa posparto, perimenopáusica o postmenopáusica. No se recomienda su uso en menores de edad, mujeres embarazadas ni en pacientes que estén en tratamiento activo por cáncer cervicouterino.

La experta explica que es importante y fundamental abiertamente de la salud vaginal. “La base de una atención oportuna y efectiva es la educación. Cuando una paciente se siente escuchada y contenida, podemos prevenir múltiples patologías que afectan su calidad de vida”, agrega.

En Chile, cada vez más clínicas están incorporando esta tecnología como parte de un enfoque más integral hacia la salud femenina, reconociendo que el bienestar íntimo es también bienestar físico, emocional y relacional. Incluso, estudios publicados en revistas como Journal of Cosmetic and Laser Therapy y Dermatologic Surgery respaldan la eficacia del HIFU en rejuvenecimiento cutáneo, con mejoras visibles en la elasticidad y firmeza de la piel después de una sola sesión, con efectos duraderos por hasta un año.