Con un aire entre nostálgico y emotivo, «Once Upon a Time… in Hollywood» sigue los pasos de Rick Dalton (DiCaprio), un intérprete de wésterns televisivos cuya carrera empieza a flaquear, y de Cliff Booth (Pitt), su especialista para las escenas de acción y compinche en la vida real.
Leonardo DiCaprio, Brad Pitt y Margot Robbie, el impresionante trío protagonista de «Once Upon a Time… in Hollywood», se rindieron hoy a la pasión «purista» por el cine y la gran «energía» que transmite Quentin Tarantino, el director de esta película, una de las más esperadas del año.
«Cuando Tarantino llama, todos vamos a acudir», resumió Pitt en una rueda de prensa en Los Ángeles sobre esta película que llegará a los cines estadounidenses el 26 de julio.
«Siempre hay algo emocionante y una electricidad palpable que sucede en sus sets», añadió DiCaprio, quien ya había trabajado con Tarantino en «Django Unchained» (2012).
«Hay una especificidad en sus diálogos que hace que casi los tomes como la Biblia, pero también hay una energía que todos tenemos por estar creando algo único y especial cada día (…). No puedo describirlo de manera específica, pero hay mucha electricidad en el ambiente», dijo sobre los rodajes con el autor de «Pulp Fiction» (1994).
Tarantino se rodeó hoy de las tres figuras de «Once Upon a Time… in Hollywood» para presentar, entre numerosos chistes y una atmósfera muy relajada, esta película metafílmica en la que explora las luces y sombras de Hollywood en 1969.
«Durante mucho tiempo quise hacer una película sobre hacer películas, que es un subgénero interesante con cintas como ‘Singin’ in the Rain’ (1952) o ‘Hooper’ (1978). Quería que tuviera lugar en el Los Ángeles de mi juventud», explicó el realizador, quien dijo que la inspiración le vino cuando vio la «fascinante» relación entre un actor y su doble de acción.
Con un aire entre nostálgico y emotivo, el filme sigue los pasos de Rick Dalton (DiCaprio), un intérprete de wésterns televisivos cuya carrera empieza a flaquear, y de Cliff Booth (Pitt), su especialista para las escenas de acción y compinche en la vida real.
Dalton, además, vive junto a la mansión en la que residen Roman Polanski y su esposa Sharon Tate (Robbie).
El papel de la tristemente ilustre víctima de Charles Manson y su secta «La Familia» permitió a Robbie colaborar por fin con Tarantino.
«Fue mucho más de lo que podía haber imaginado. Le quería ver trabajando», aseguró la australiana, quien afirmó que fue al rodaje incluso cuando ya había terminado sus escenas solo para aprender y disfrutar de la labor del realizador.
Por otro lado, Robbie bromeó con que, en sus sueños, se había imaginado que cuando participara en una película de Tarantino interpretaría a un personaje con «armas», «sangre» y «dando palizas», por lo que su rol en «Once Upon a Time… in Hollywood» fue algo completamente diferente a lo que había proyectado.
«Soy un enorme fan de las películas sobre Hollywood y la interpretación de Tarantino sobre eso es muy única. Me encanta la mirada de los ‘outsiders'», señaló DiCaprio.
El ganador del Óscar por «The Revenant» (2015) destacó que aquí «dos tipos de clase obrera» ven ante sus ojos la experimentación de los años 60, la revolución hippie y los cambios del Nuevo Hollywood que darían un revolcón a los grandes estudios y abrirían puertas a una nueva generación de cineastas.
«Rick no sabe cómo encajar en ese nuevo tiempo (…). Y me gusta que él y Cliff miren a esa especie de castillo al lado, donde viven Polanski y Tate, y vean ese Hollywood al que no pertenecen realmente», consideró.
Y aunque la melancolía por, quizá, tiempos más fáciles o sencillos sobrevuela esta cinta, DiCaprio ironizó sobre su opinión al respecto.
«¿Qué extraño (del Hollywood de los 60 comparado con el actual)? Yo, básicamente, solo veo películas antiguas. Y solo escucho música antigua, así que estás hablando con alguien que vive en un estado constante de nostalgia», comentó divertido.
«Es en su mayoría una carta de amor (a Hollywood), pero no creo que tenga tanta nostalgia como la gente dice», contrapuso Tarantino sobre esta película que se estrenó en el pasado Festival de Cannes y que, según bromeó, tiene «un 75 % de carta de amor» y «un 25 % de crítica».
Por último, los cuatro abordaron la excepcional ambientación y producción de «Once Upon a Time… in Hollywood» para recrear el Los Ángeles de hace medio siglo con decorados de lo más detallistas.
«Tarantino es tan purista que no hay efectos digitales. Percibo que en su mente eso sería como hacer trampas», dijo Pitt, a lo que el director respondió inmediatamente dándole la razón: «¡Oh, sí! ¡Por supuesto! ¡Cualquiera podría hacer eso…!».