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Trabajadores de la cultura solidarizan con colectivo Kontrabando y funcionarios del MIM tras suspensión de feria por amenazas CULTURA Créditos Imagen: Feria Kontrabando

Trabajadores de la cultura solidarizan con colectivo Kontrabando y funcionarios del MIM tras suspensión de feria por amenazas

Tras recibir amenazas y hostigamientos a través de redes sociales, desde la Feria Kontrabando que se iba a realizar durante este fin de semana en el Museo Interactivo Mirador (MIM) decidieron cancelar el evento. Frente a esto, distintas organizaciones del rubro emitieron un comunicado para solidarizar con los organizadores, e indicaron que repudian «que desde sectores de ultra derecha, identificados con el rechazo a la Nueva Constitución democrática, se intente coartar la libertad de expresión de las y los creadores del colectivo».


Luego de recibir reiterados hostigamientos por redes sociales y amenazas para impedir el normal funcionamiento de la Feria Kontrabando, el colectivo que organizaba la actividad junto con el Museo Interactivo Mirador (MIM) informaron a través de un comunicado la suspensión del evento que se iba a realizar este fin de semana.

La suspensión se realizó «producto de la difusión de información tergiversada y difundida sin corroborar por algunos medios de comunicación, desvirtuando el verdadero tenor de la actividad que se iba a realizar, que estaba dirigida a niños y niñas, y no contenía mensajes de odio o violencia de ningún tipo», informaron a través de la declaración.

Ante el hecho distintas organizaciones de trabajadores de la cultura solidarizaron a través de un comunicado con los trabajadores del Colectivo Kontrabando y MIM.

«Las organizaciones de trabajadores de trabajadoras firmantes manifestamos nuestra solidaridad con las y los integrantes del colectivo Kontrabando que, anteponiendo la integridad y seguridad de su público y la de trabajadores/as del MIM, han decidido suspender la actividad Feria Invernal Kontrabando debido a las amenazas y hostigamiento a las que se han visto expuestos junto a trabajadores/as del MIM, con quienes también solidarizamos, debido a la acción de  adherentes al Rechazo, a raíz de denuncias infundadas con amplia repercusión mediática que realizaron parlamentarios de Renovación Nacional, que pedían cancelar la feria por, según ellos, incitar al odio», expresa el comunicado. 

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La carta fue firmada por la Asociación Nacional de Trabajadoras y Trabajadores del Servicio Nacional de Patrimonio Cultural (ANFUPATRIMONIO), la Asociación Nacional de Trabajadores del Patrimonio (ANATRAP), Asociación Nacional de Funcionarios y Funcionarias de la Subsecretaría de las Culturas y las Artes (ANFUCULTURA), Asociación Nacional de Funcionarios de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, (AFUCAP), Sindicato de Trabajadores a Honorarios Subsecretaría de las Culturas y las Artes, Santiago y Sindicato de Trabajadores a Honorarios Subsecretaría de las Culturas y las Artes, Valparaíso.

Amenazas y hostigamientos

En relación a las amenazas que recibieron a través de redes sociales los organizadores de la feria, las organizaciones se refirieron específicamente a los dichos de diputados de Renovación Nacional que criticaron el evento.

«La ola de amenazas, descalificaciones y hostigamiento que se ha desatado sobre las y los organizadores son justamente las muestras del odio que los diputados de Renovación Nacional Sara Concha,  Francesca Muñoz, y Andrés Longton, acusaban de manera infundada e irresponsable, sobre algunas de las piezas artísticas presentes en la feria», sostiene el documento.

«Repudiamos que desde sectores de ultra derecha, identificados con el rechazo a la Nueva Constitución democrática, se intente coartar la libertad de expresión de las y los creadores del colectivo, recordando los pasajes más oscuros de la censura de la dictadura cívico militar de Pinochet sobre el campo cultural durante 17 años de tiranía», añadieron.

Finalmente, la declaración manifiesta:»Esperamos que el colectivo Kontrabando y las numerosas agrupaciones de ferias culturales y artísticas de Chile  puedan seguir desarrollando su trabajo en los territorios donde es valorado y genera experiencias vitales que ayudan a la vida comunitaria, como en este caso, la comuna de La Granja. Del mismo modo, aspiramos a que en el Chile que comenzamos a construir con la Nueva Constitución no exista espacio para este tipo de acciones articuladas por grupos conservadores  a los que la luz de la cultura espanta».

 

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