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“Barca del NosOtrxs…” nuestra Mistral CULTURA|OPINIÓN Crédito: Cedida

“Barca del NosOtrxs…” nuestra Mistral

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Ricardo Espinoza Lolas
Por : Ricardo Espinoza Lolas Doctor en filosofía
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Mistral tenía el don del estilete desde el verso al habla y su visión del mundo. Y lo propio de ese don era uno de construir Barcas del NosOtrxs que generaran en la radicalidad de ese estilo, de ser y de escribir y hablar, un posibilitar que desde niños a viejos, desde mujeres a hombres.


Si miramos a nuestro alrededor con alguna detención cuando nos despertamos en las mañanas; si vemos las noticias por las redes sociales o algún medio de comunicación “oficial o tradicional” o de las actuales comunidades tecnológicas en sus diferentes plataformas; y si nos encontramos con un vecino de nuestro edificio al salir a trabajar, nos topamos con un “espectáculo horroroso”.

Al parecer, la vida de millones de humanos no tiene mucho valor para otros millones de humanos: nos agredimos los unos a los otros día a día, no paramos de hacerlo en distintas partes de este pequeño planeta, no aprendemos nada de la historia y volvemos a dañarnos de forma visceral (incluso queremos exterminar a “otros” humanos), y siempre lo fundamentamos por alguna razón, a saber: él me agredió primero; ellos no son como nosotros; ese territorio me pertenece; estoy en mi libertad de hacerlo; no quiero nada con ese tal o cual; su diversidad sexual me ofende; su religiosidad atenta contra la mía; su ideología es parte del problema; esto perjudica nuestro negocio; y un largo etcétera que, a veces, se vuelve solamente en una vacía y perversa retórica y, lo que es peor, de esta manera se justifica lo injustificable: el “odio al otro”.

No más “odio al otro”

El “odio al otro” se expresó en la Segunda Guerra Mundial, en la destrucción masiva de los campos de exterminio de los nazis, y en las dos bombas atómicas que generó Estados Unidos con una ciencia, técnica y tecnología jamás vista hasta esos momentos. Esta situación se repite hoy con los conflictos entre Israel e Irán, Ucrania y Rusia, Pakistán e India.

Pero si aprendiéramos de la historia -algo- una pequeña lección. Por ejemplo, nuestra Gabriela Mistral, la gran poetisa chilena, quien fue galardonada con el Nobel de Literatura en 1945, podríamos entender lo que es un “NosOtrxs” y en especial, una “Barca del NosOtrxs”, y así intentar construir lo ético-político para todos, en donde nadie está excluido, nadie sobra y todos en sus diferencias están llamados a ser parte.

¿Qué significa ese premio a nuestra poeta? Hoy, en pleno 2025, debemos recordarlo para no repetir lo que nos destruye. ¿Qué tiene la poesía de Mistral que su Nobel de 1945 se vuelve un reconocimiento ejemplar para ese año y para todas las generaciones futuras? Lo que posee es una Barca del NosOtrxs. Sus tan solo tres poemarios son parte de una obra escrita y vivida de Mistral desde Chile al mundo entero, desde los años veinte hasta ese 1945 y que luego se prolongó de forma radical y sostenida hasta su muerte el 10 de enero de 1957. Ella como poeta fue una gran literata y escritora con una prosa creativa, audaz y punzante: realmente excepcional. Mistral era dueña de un estilo que se volvió en un “estilete” para las cartas que escribía, las intervenciones de todo tipo por sus cargos diplomáticos en tantos países y ciudades en las que vivió, por las conferencias que dio en universidades y todo tipo de organizaciones en Chile y en diversos lugares, por sus asesorías de todo tipo, desde formales en el ámbito educativo, como en lo personal y en el territorio de más intimidad, por ejemplo, con Zweig en Brasil. Nuestra Mistral encarna lo más propio del chileno, de América Latina, de lo femenino, de lo nativo, de un modo de ser “tierra y mar” por donde navegamos todos.

Mistral tenía el don del estilete desde el verso al habla y su visión del mundo. Y lo propio de ese don era uno de construir Barcas del NosOtrxs que generaran en la radicalidad de ese estilo, de ser y de escribir y hablar, un posibilitar que desde niños a viejos, desde mujeres a hombres, desde letrados a ignorantes, desde cultos a pueblerinos, desde todos en sus diferencias pudieran establecer un tipo de Educación en que cada uno es parte de un todo integrado: no podemos construir nuestras vida sin el otro.

Es posible amarnos los unos a los otros.

Barcas del NosOtrxs…

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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