La decena de ecuatorianos duermen en cuatro carpas instaladas en la sede diplomática, ubicada en la comuna de Providencia, las que van usándose por turnos para poder dormir.
Al igual que pasa con las comunidades bolivianas y venezolanas, hay decenas de inmigrantes ecuatorianos que formaron un improvisado campamento afuera de su embajada en Santiago, pidiendo soluciones para poder regresar a su país.
Son cuatro carpas instaladas en la sede diplomática, ubicada en la comuna de Providencia, las que van usándose por turnos para poder dormir.
Uno de los que fundó el improvisado campamento, Luis Soriano, explicó a radio Cooperativa que son sólo una fracción de más de 70 ecuatorianos que, en total, esperan alguna alternativa de repatriación. «Tenemos niños, mujeres embarazadas y ancianos que no podemos exponer aquí», contó.
«Queremos regresar a nuestro país, porque no tenemos dinero para pagar piezas ni para comer. Buscamos que nuestro gobierno se pronuncie, a través de la embajada, que alguien nos diga que nos ayudará y que si hay un vuelo humanitario, que no nos cobren, porque no podemos pagar el viaje», dijo.
«Las carpas y la comida nos las facilitaron los compañeros colombianos, porque no teníamos nada. También hay amigos chilenos ayudando», agregó Soriano.
Sobre la situación de estos inmigrantes, el canciller Teodoro Ribera dijo que «nos preocupa mucho. Son personas de escasos recursos que necesitan retornar a sus países y no pueden hacerlo no porque Chile no les abra las puertas, sino que porque sus países les cierran el retorno».