La firma de reatail anunció una completa de reestructuración de su área de créditos y cobranza tras detectar una serie de malas prácticas «relacionadas con las renegociaciones de deuda de los tenedores de tarjeta» y que tendrían un efecto en el nivel en sus provisiones adicionales por un monto estimado en US$400 millones. Esta crisis se conoce una semana después que el Sernac demandara a la compañía por la repactación automática e inconsulta de las deudas de sus clientes. [Actualizada]
Las acciones de La Polar registraron el jueves un histórico desplome de más del 41% en la Bolsa de Comercio de Santiago que obligaron a la Superitendencia de Valores y Seguros (SVS) a suspender momentáneamente sus transacciones.
¿La razón? El hecho esencial a través del cual la compañía dio cuenta esta mañana de importantes cambios en su plana directiva tras detectar una serie de malas prácticas de la compañía «relacionadas con las renegociaciones de deuda de los tenedores de tarjeta».
La empresa detalló que en dos sesiones extraordinarias de su directorio relizadas el lunes 6 y el miércoles último, «se tomó conocimiento de prácticas en la gestión de su cartera de crédito, que se habrían efectuado de una forma no autorizada por el directorio y en disconformidad con los criterios y parámetros establecidos por la compañía».
Asimismo, detalla que esas prácticas «podrían tener un efecto en el nivel de provisiones adicionales requeridas por la compañía, no dimensionado íntegramente hasta la fecha, pero que de acuerdo a estimaciones de la compañía debieran encontrarse en un rango de entre 150 a 200 mil millones de pesos», es decir, alrededor de 400 millones de dólares.
Además de indicar que ese monto será precisado dentro de tres semanas, La Polar anunció una serie de medidas,como el nombramiento de Eduardo Bizama Cabalá como nuevo gerente general de la compañía, quien asumirá sus funciones el 25 de julio próximo. Hasta esa fecha continuará en el puesto de manera interina Martín González Iakl, quien posteriormente volverá a desempeñarse como gerente comercial.
Se indicó que se dio inicio a una completa reestructuración de su área de Créditos y Cobranza. Por ello el directorio pidió la renuncia del gerente de Productos Financieros que estaba a cargo del área, designándose a un reemplazante. Además se c0ntrató a Hernán Arancibia como el nuevo gerente de Crédito.
La firma de retail anunció «una inmediata y exhaustiva evaluación externa de la cartera de crédito, que involucre la revisión de los procedimientos y prácticas tanto en sus aspectos comerciales como operacionales y de riesgo de negocio de crédito de la compañía, incluyendo especialmente, un informe acerca de la calidad e la cartera y el nivel de provisiones requerido». Para tal efecto, se contrató a la empresa auditora Ernst & Young.
La noticia hizo caer a cifras históricas las acciones de La Polar en la Bolsa de Comercio de Santiago. De hecho, cuando registraban una caída del 20% la SVS resolvió suspender las transacciones de sus títulos. Sin embargo, cuando a las 11:00 horasdel jueves volvieron a transarse, continuaron su caída libre registrando al cierre de la sesión una baja de 42,26% y arrastrando consigo al IPSA, principal indicador de la Bolsa de Santiago, que anotó un retroceso de 1,18%.
Esta situación se produce luego que el pasado 2 de junio el Servicio Nacional de Consumidor (Sernac) presentara ante el 1° Juzgado Civil de Santiago una demanda colectiva contra la tienda del eslogan «Es Llegar y Llevar» por repactar de manera unilateral las deudas de sus clientes de tarjetas y sin el consentimiento de los clientes.
Según explicó el Sernac, desde el año pasado, comenzó a recibir reclamos masivos contra esta firma por parte de consumidores que se quejaban de que en sus cuentas aparecían reprogramaciones que nunca habían aceptado, con cuotas y montos que eran fijados por la empresa y encarecerían excesivamente la deuda, o bien se enteraban de ello tras recibir cartas de cobranza o aparecer en Dicom. Incluso, hay consumidores que dicen haber recibido más de 10 repactaciones por una misma deuda.
Tras detectar esta situación, el organismo fiscalizador realizó una mediación colectiva exigiendo a la empresa una solución que beneficiara a todos los afectados y eliminara definitivamente esta mala práctica. La Polar entregó una propuesta consistente en revertir las repactaciones y los cargos; eliminarlos de Dicom; un nuevo plan de reprogramación de la deuda con un descuento en los intereses de acuerdo al número de cuotas y compensar el costo del reclamo con un cupón de $2 mil para canjearlo por compras, entre otros compromisos.
Sin embargo, de acuerdo al análisis de una auditoría externa exigida por el Sernac, «la empresa no cumplió de manera satisfactoria ni en los plazos correspondientes y además, continuó cometiendo las malas prácticas que se reflejan en los reclamos que se han seguido recibiendo en el Sernac hasta esta fecha.
Uno de los fundamentos de la demanda es que la empresa al otorgar nuevos plazos, genera nuevos costos por sobre el capital, más los intereses asociados a la repactación, los gastos mensuales por administración de la tarjeta de crédito, el pago de seguros, sin mencionar que pueden haber costos asociados a las cobranzas cuando hay nuevos atrasos.
El director nacional del Sernac, Juan Antonio Peribonio, señaló al respecto que si bien es cierto la repactación es un ofrecimiento voluntario de las empresas, deben respetar los derechos de los consumidores y, principalmente pedir su consentimiento respecto a las nuevas condiciones de pago. «Los consumidores no pierden sus derechos por tener deudas impagas».
