Publicidad
En su hora más compleja, Jorge Rosenblut, presidente de Enersis, se ausenta de cena anual del gremio de las eléctricas

En su hora más compleja, Jorge Rosenblut, presidente de Enersis, se ausenta de cena anual del gremio de las eléctricas

Publicidad


Jorge Rosenblut vive su momento más complejo.

De acuerdo a Ciper, la próxima semana el presidente de Enersis tendrá que ir a ante la Fiscalía declarar como el próximo imputado en la arista SQM del caso Penta. Pero antes, este viernes 19 de junio, el directorio de Endesa tratará el tema de los aportes ilegales que ya admitieron ante la SVS que se hicieron durante el periodo en que Rosenblut era presidente.

Hay una creciente especulación en cuanto a que la posición de Rosenblut es insostenible y que eventualmente tendrá que renunciar a la presidencia de Enersis, ya sea por decisión propia o por presión de Enel, la italiana que controla el holding en Chile. Mal que mal, preside el directorio de una empresa regulada y la de más peso en la bolsa local.

Un reflejo de la complejidad de la situación que enfrenta, es que anoche no estuvo presente en la Cena Anual de la Energía Eléctrica, organizada por la Asociación Gremial de Generadoras de Chile y la Asociación Gremial de Empresas Eléctricas, donde estuvieron todos los máximos ejecutivos del sector, además de la Presidenta Michelle Bachelet y el ministro de Energía, Máximo Pacheco. Es un evento que en el pasado el ejecutivo jamás se hubiese perdido. Hay versiones de que su ausencia de anoche fue a petición de La Moneda. El argumento es que Bachelet no podía ser vista en la misma mesa que el cuestionado personaje.

Hace varias semanas que la investigación del financiamiento ilegal de la política alcanzó a Rosenblut. Es sindicado como el arquitecto del esquema de financiamiento de la campaña de Michelle Bachelet y del diseño de la precampaña que operó a través de la empresa de Giorgio Martelli.

Como este medio reveló semanas atrás, Rosenblut abordó a alrededor de cinco o siete empresas para que contribuyeran con entre 300 y 500 millones de pesos. SQM, Endesa y el Grupo Angelini fueron parte de ese esquema.

Endesa informó esta semana a la SVS que una auditoría interna del grupo determinó que, desde 2012 a la fecha, se hicieron pagos por $ 333 millones a Personas Expuestas Políticamente y otros $ 216 millones a las sociedades vinculadas a campañas políticas.

Publicidad