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Siguen los reparos al proyecto que rebaja la jornada a 40 horas: exministro Rodrigo Valdés advierte que “equivale a un aumento del 11% del costo laboral” MERCADOS

Siguen los reparos al proyecto que rebaja la jornada a 40 horas: exministro Rodrigo Valdés advierte que “equivale a un aumento del 11% del costo laboral”

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En su ofensiva por sacar adelante su propio proyecto de ley por sobre el presentado por la diputada comunista Camila Vallejo, el Gobierno encontró un nuevo aliado, el cual proviene directamente desde la oposición: el exministro de Hacienda de Michelle Bachelet, Rodrigo Valdés, quien recalcó los efectos sobre el costo laboral de la iniciativa de la parlamentaria. Por su parte, desde el oficialismo, el presidente RN advirtió que le preocupan los efectos en las pymes que podría tener la iniciativa presentada por la oposición, mientras el Ejecutivo se apresta a agilizar la tramitación de su proyecto en el Congreso, bajo el argumento de que “Chile debe aspirar a una mayor adaptabilidad”.


La semana pasada, el proyecto de ley que busca reducir la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales pasó su primera prueba, ya que fue aprobado por la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados, pese a las abstenciones de los diputados oficialistas.

Tras la aprobación, la que deberá ser ratificada en Sala, desde el Gobierno comenzaron un plan para contrarrestar ese proyecto, ya que complica su propia propuesta de adaptabilidad laboral que presentó el ministro de Trabajo, Nicolás Monckeberg, en mayo pasado.

En esta lucha para sacar adelante su proyecto de ley por sobre el presentado por la diputada comunista Camila Vallejo encontraron un nuevo aliado, pero no desde los gremios que han levantado la voz contra la iniciativa, sino que viene directamente desde la oposición: el exministro de Hacienda de Michelle Bachelet, Rodrigo Valdés, quien recalcó los efectos sobre el costo laboral de la iniciativa de la parlamentaria.

«Respecto al cuánto, dejemos a los políticos hacer su trabajo, yo creo que es malo poner números muy fijos, pero sí me gustaría llamar la atención en una cosa», comenzó a explicar en una intervención durante un seminario respecto a la reforma previsional organizado por la Universidad Católica. Después ahondó: «La propuesta de baja de horas de trabajo de 45 a 40 sin cambios salariales, equivale a un aumento del 11% del costo laboral».

Entre las razones que esgrimieron las impulsoras de la reducción de las horas de trabajo, Camila Vallejo aseguró, en declaraciones al programa ‘Mesa Central’ de Canal 13, que «los trabajadores han cargado por décadas con las isapres, con las AFP, con las empresas, con los abusos (…), aquí tiene que haber una política pública que les permita desarrollarse después de todo lo entregado».

Por su parte, su correligionaria Karol Cariola dijo al mismo programa que «cuando estamos hablando de disminuir la jornada laboral, de mejorar y regular de mejor forma del trabajo (…), esto tiene que ver con distribuir de mejor manera la riqueza. No podemos mirar la perspectiva del trabajo desde la lógica del empleador”.

La ofensiva del Gobierno

En esta ofensiva contra el proyecto opositor, el subsecretario del Trabajo, Fernando Arab, cuestionó su sostenibilidad desde el punto de vista presupuestario y de congruencia: «No solo no está bien elaborado, sino que tiene una visión bastante simplista de lo que es mejorar la jornada de trabajo», dijo.

Y no se queda solo en declaraciones, sino que adelantó lo que hará el Ejecutivo: se preparan para agilizar la tramitación de su proyecto en la comisión de Trabajo del Senado. Para eso, esperaran a que se apruebe en dicha instancia el proyecto de Sala Cuna, lo que debería ocurrir en agosto. Después, «le pondremos urgencia legislativa al proyecto de adaptabilidad laboral, porque cada vez se hace más importante avanzar en mayor flexibilidad, a fin de terminar con la rigidez de nuestra actual legislación y que los trabajadores sean más dueños de su tiempo. Necesitamos que el trabajo se adapte a la vida y no la vida al trabajo», argumentó Arab.

El subsecretario enfatizó que “a lo que Chile debe aspirar, no es solo a una reducción de jornada, sino a mayor adaptabilidad. Esto, pensando en que somos uno de los países con menores niveles de productividad dentro de la OCDE”.

En el oficialismo, tras el comité político de los lunes en La Moneda, el presidente de Renovación Nacional, Mario Desbordes, indicó que no hay una postura como partido frente a este proyecto que reduce a 40 horas. Sin embargo, manifestó sus dudas respecto a la iniciativa.

“Me preocupan las pymes, qué pasa con las pymes en este caso, las empresas grandes puedan absorber esto sin ningún problema, me preocupa el impacto en pequeños y medianos empresarios, sobre todo del comercio, que pucha que les cuesta. Además que hay un proyecto del Ejecutivo que actualiza la normativa laboral a la realidad del siglo XXI y debe empezar a tramitarse”, indicó Desbordes.

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