MERCADOS
Créditos: Reuters
Tras un fin de semana agitado, los reguladores dijeron que los clientes de SVB tendrán acceso a todos sus depósitos a partir del lunes y establecieron un nuevo mecanismo para dar a los bancos acceso a fondos de emergencia. La Reserva Federal también facilitó a los bancos la obtención de préstamos en caso de necesidad.
Las autoridades estadounidenses lanzaron el domingo medidas de emergencia para apuntalar la confianza en el sistema bancario, después de que la crisis de Silicon Valley Bank amenazara con desencadenar una crisis financiera generalizada.
Tras un fin de semana agitado, los reguladores dijeron que los clientes de SVB tendrán acceso a todos sus depósitos a partir del lunes y establecieron un nuevo mecanismo para dar a los bancos acceso a fondos de emergencia. La Reserva Federal también facilitó a los bancos la obtención de préstamos en caso de necesidad.
Aunque las medidas proporcionaron cierto alivio a las empresas de Silicon Valley y a los mercados globales el lunes, persiste la preocupación por los riesgos bancarios más amplios y han sembrado dudas sobre si la Reserva Federal mantendrá su plan de subidas agresivas de los tipos de interés.
“Creemos que las medidas tomadas por la Reserva Federal, el Tesoro y la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés) romperán de forma decisiva el bucle psicológico del sector bancario regional”, dijo Karl Schamotta, estratega jefe de mercado de Corpay en Toronto.
“Pero, con justicia o sin ella, el episodio contribuirá a elevar los niveles de volatilidad de fondo, con los inversores atentos a la aparición de otras grietas a medida que continúe el endurecimiento de la política de la Reserva Federal”.
Los reguladores también actuaron con rapidez para cerrar eSignaturerBanknk, una entidad de Nueva York que había estado bajo presión en los últimos días.
Los esfuerzos por evitar una crisis hicieron subir los futuros bursátiles de Wall Street en el mercado asiático el lunes, lo que ayudó a los mercados en general.
Sin embargo, las persistentes preocupaciones sobre el sector financiero pesaron sobre las principales acciones bancarias, con HSBC Holdings, Standard Chartered Bank, el japonés Mitsubishi UFJ y el singapurense DBS cotizando a la baja.
La intervención del Gobierno de Biden subraya cómo la implacable campaña de la Reserva Federal y otros grandes bancos centrales para hacer retroceder la inflación está sometiendo a tensión al sistema financiero y a los mercados mundiales.
Silicon Valley Bank (SVB), un pilar de la economía de las empresas emergentes o “startups”, fue un producto de la era de dinero barato que duró décadas, con riesgos únicos que lo hicieron especialmente vulnerable. Pero cuando la semana pasada se produjo una crisis en el banco, se extendió rápidamente la preocupación de que otros bancos regionales compartían similitudes.
Con la Reserva Federal preparada para seguir subiendo los tipos de interés, los inversores afirmaron que el sistema financiero podría no estar aún totalmente fuera de peligro.
La Fed celebra su próxima reunión de política monetaria los días 21 y 22 de marzo. Analistas de Goldman Sachs afirmaron que ya no esperan que suba los tipos en esa reunión, en medio de las tensiones en el sector bancario. Anteriormente, Goldman esperaba una subida de 25 puntos básicos en marzo.
“Lo que los inversores tienen que esperar de cara a mañana y más adelante es que vamos a estar lidiando con mucho riesgo de eventos”, dijo Michael Purves, director ejecutivo de Tallbacken Capital Advisors. “Todavía va a haber preguntas persistentes con otros bancos regionales”.
El colapso de SVB —la mayor crisis bancaria desde 2008— desató preocupaciones sobre si los clientes de pequeñas empresas podrían pagar a su personal, ya que la FDIC sólo protege los depósitos de hasta 250.000 dólares.
Alrededor del 89% de los 175.000 millones de dólares en depósitos de SVB no estaban asegurados a finales de 2022, según FDIC.
Todos los depositantes, incluidos aquellos cuyos fondos superen el nivel máximo asegurado por el Gobierno, serán indemnizados, según una declaración conjunta de la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, el presidente de la Fed, Jerome Powell, y el presidente de la FDIC, Martin Gruenberg, el domingo por la noche.
Un alto responsable del Tesoro de EEUU dijo que las medidas adoptadas protegerían a los depositantes, al tiempo que proporcionarían apoyo adicional al sistema bancario en general, pero que las autoridades y los reguladores seguían vigilando la estabilidad del sistema financiero.
“Las empresas no están siendo rescatadas. Se está protegiendo a los depositantes”, dijo el responsable.
El riesgo sería asumido por el Fondo de Seguro de Depósitos, que dispone de fondos suficientes para ello.
Según el responsable, se consideró más rápido proporcionar las excepciones de riesgo sistémico que esperar a un posible comprador.
Responsables del Tesoro dijeron que los depositantes de Signature Bank de Nueva York, que fue cerrado el domingo por el regulador financiero del estado de Nueva York, también serían indemnizados sin pérdidas para el contribuyente.
Signature, al igual que SVB, tenía una clientela concentrada en el sector tecnológico, y los valores de su balance se habían erosionado a medida que subían los tipos de interés. En septiembre, casi una cuarta parte de los depósitos de Signature procedían del sector de las criptomonedas, pero el banco anunció en diciembre que reduciría sus depósitos relacionados con las criptomonedas en 8.000 millones de dólares.
Aunque todos los depósitos de los clientes estarán protegidos, las nuevas políticas adoptadas el domingo “acabarán” con los accionistas y tenedores de bonos de SVB y Signature Bank, dijo un alto responsable del Tesoro estadounidense.
Junto con la decisión de la Reserva Federal de garantizar que las instituciones financieras puedan satisfacer las necesidades de todos sus depositantes, las medidas “restablecerán la confianza del mercado”, afirmó el responsable.
Los futuros de los fondos de la Reserva Federal subían el lunes hasta alcanzar sólo un 17% de probabilidades de que la Reserva Federal suba los tipos medio punto cuando se reúna la semana que viene, muy lejos del 70% que había antes de conocerse la noticia del SVB la semana pasada.
La Fed dijo que pondría a disposición financiación adicional a través de un nuevo Programa de Financiación Bancaria a Plazo, que ofrecería préstamos de hasta un año a las instituciones depositarias, respaldados por bonos del Tesoro y otros activos que estas instituciones posean.
Cuando la pandemia del coronavirus desató el pánico financiero en marzo de 2020, la Reserva Federal anunció una serie de medidas para mantener el flujo de crédito mediante la reducción de los costes de los préstamos y la ampliación de los plazos de los préstamos directos. A finales de ese mes, el uso de la ventanilla de descuento de la Fed se disparó a más de 50.000 millones de dólares.
Hasta mediados de la semana pasada, antes de la crisis del SVB, no había indicios de que se hubiera recuperado el uso, y los datos de la Reserva Federal mostraban saldos semanales pendientes de entre 4.000 y 5.000 millones de dólares desde principios de año.
Video vía Twitter: @dw_espanol
